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Desde hace casi un siglo la asociación de los corresponsales de prensa acreditados ante la Casa Blanca celebra anualmente una cena con el presidente de Estados Unidos. El evento es una combinación de periodismo, política, farándula y moda. En un ambiente relajado se toma la temperatura de la relación de los medios con el poder ejecutivo. El evento suele ser una oportunidad para que el presidente declare su respeto a la Primera Enmienda (libertad de expresión). No sucedió así en la presidencia de Trump quien en muchas ocasiones acusó a los periodistas de ser enemigos del pueblo y fabricantes de noticias falsas.
En la cena de este año Biden se lanzó con un chiste contra Fox News: -Si los periodistas de esa cadena están aquí, es porque después de la conciliación por US$ 787 (se refería al pleito con Dominion) no pueden resistirse a una comida gratis. La risotada fue general y se entendió bien el gracejo. Al fin y al cabo, el prestigio de esa cadena está por el piso y, después del daño que causó, se merecía la broma.
En un tono que no parece ser broma, el presidente Petro en las últimas semanas ha culpado a la prensa del tropiezo de sus propuestas legislativas. La acusación se hace de manera genérica, lo cual genera el grave riesgo de que parezca que se quiere satanizar la información y la opinión de quienes critican las acciones del gobierno. Si bien cabe la posibilidad de que algunos medios hayan incurrido en exageraciones o desinformación (no es difícil identificarlos), es mucho más dañino el efecto de las malas prácticas en las redes sociales y hay que reconocer que de ellas se sirven, tanto amigos como enemigos del gobierno. La pugnacidad entre la prensa y el poder político no es una novedad; históricamente los presidentes siempre se quejan de que las noticias distorsionan su gestión.
Con los sucesos de la semana pasada y las polémicas declaraciones del presidente de la República es imposible por lo pronto una cena con directores de medios y opinadores. Mientras tanto no debe quedar duda de que se garantiza plenamente la libertad de expresión.
@jcgomez_j
