Al repasar el tema del déficit de vivienda en Colombia, las cifras siguen mostrando que, a pesar de las mejoras recientes, más de tres millones de hogares colombianos aún no viven en una casa que cumpla con las condiciones adecuadas de habitabilidad. Esto es, que un poco más del 25 % de los hogares a nivel nacional están en esta condición.
Las cifras no son buenas pero, ahora que estamos viendo la necesidad de darle el enfoque territorial a este país de territorios diversos, en algunos departamentos los déficits son muy elevados y más que triplican el total nacional. Para dar algunos ejemplos, el 84 % de los hogares del Chocó presentan un déficit cualitativo o cuantitativo de vivienda, el 62 % en Córdoba, el 61 % en La Guajira, el 59 % en Magdalena, el 54 % en Sucre y el 52 % en Bolívar. En ciudades como Bogotá el déficit es del 8 % y en los departamentos del Eje Cafetero del 12 %. Antioquia tiene un déficit del 18 %.
Estas cifras dan una idea para concentrar los esfuerzos de política pública y revisar el déficit de vivienda no sólo en forma relativa, sino en forma absoluta. El esfuerzo de construcción de vivienda nueva que estamos haciendo anualmente es grande, pero no alcanza para compensar la creación de nuevos hogares y disminuir gradualmente el déficit. Se necesitan aún más esfuerzos para agilizar el número anual de viviendas construidas.
Esta es una gran oportunidad para disminuir las diferencias regionales y darles una vivienda habitable a muchos hogares colombianos, pero también una oportunidad para seguir activando la economía colombiana. El motor de la construcción de vivienda ha probado ser un gran reactivador y planes como PIPE I y II han aprovechado esa oportunidad para darle dinamismo a la economía como un todo y a sectores de la industria y al empleo.
Economista jefe BBVA Research Colombia. @juanatellez
Al repasar el tema del déficit de vivienda en Colombia, las cifras siguen mostrando que, a pesar de las mejoras recientes, más de tres millones de hogares colombianos aún no viven en una casa que cumpla con las condiciones adecuadas de habitabilidad. Esto es, que un poco más del 25 % de los hogares a nivel nacional están en esta condición.
Las cifras no son buenas pero, ahora que estamos viendo la necesidad de darle el enfoque territorial a este país de territorios diversos, en algunos departamentos los déficits son muy elevados y más que triplican el total nacional. Para dar algunos ejemplos, el 84 % de los hogares del Chocó presentan un déficit cualitativo o cuantitativo de vivienda, el 62 % en Córdoba, el 61 % en La Guajira, el 59 % en Magdalena, el 54 % en Sucre y el 52 % en Bolívar. En ciudades como Bogotá el déficit es del 8 % y en los departamentos del Eje Cafetero del 12 %. Antioquia tiene un déficit del 18 %.
Estas cifras dan una idea para concentrar los esfuerzos de política pública y revisar el déficit de vivienda no sólo en forma relativa, sino en forma absoluta. El esfuerzo de construcción de vivienda nueva que estamos haciendo anualmente es grande, pero no alcanza para compensar la creación de nuevos hogares y disminuir gradualmente el déficit. Se necesitan aún más esfuerzos para agilizar el número anual de viviendas construidas.
Esta es una gran oportunidad para disminuir las diferencias regionales y darles una vivienda habitable a muchos hogares colombianos, pero también una oportunidad para seguir activando la economía colombiana. El motor de la construcción de vivienda ha probado ser un gran reactivador y planes como PIPE I y II han aprovechado esa oportunidad para darle dinamismo a la economía como un todo y a sectores de la industria y al empleo.
Economista jefe BBVA Research Colombia. @juanatellez