Diez días después de que se supo del bombardeo en el Guaviare en el que oficialmente murió una niña, el Estado no ha dicho nada. Ni el presidente, ni la primera dama, ni ningún ministro, ni ningún asesor han salido a lamentar que las bombas le hayan caído encima a Danna Lizeth Montilla y tal vez a Yeimi Sofía Vega también.
Por Lariza Pizano
Politóloga de la Universidad de los Andes, académica y especialista en política colombiana.