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El Arte y La Cultura

El cincuentenario de Uribe Holguín

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Manuel Drezner
09 de julio de 2021 - 02:00 a. m.
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Es una vergüenza para las entidades culturales colombianas que hayan dejado pasar inadvertido el cincuentenario de la muerte del ilustre músico colombiano Guillermo Uribe Holguín. Ninguna de nuestras orquestas programó al menos una de sus obras, los centros culturales nada dijeron sobre él y tampoco hubo artículos que señalaran esta importante conmemoración. Eso es extraño porque Uribe Holguín fue fundamental en el desarrollo de la música colombiana, no solo por la magnitud de su obra, sino por haber sido él quien convirtió una modesta academia de música en el Conservatorio Nacional, donde se formaron buena parte de las generaciones musicales colombianas del siglo pasado. Igualmente, fue quien creó la primera orquesta sinfónica permanente, que se convertiría en la Orquesta Sinfónica de Colombia, que fomentó y permitió a grandes públicos conocer el repertorio sinfónico.

Su obra es extensa, ya que incluye más sinfonías que las de Beethoven, una ópera sobre temas nacionalistas y cantidad de obras instrumentales y de música de cámara. Puede decirse que el volumen de su obra lo convierte en uno de los músicos más prolíficos de América. Uribe Holguín fue uno de los dos colombianos que pudo estudiar en la célebre Schola Cantorum, de París, que dirigía Vincent d’Indy. Claro que muchos consideran ese un honor dudoso porque esa institución, a la larga, se volvió famosa por ser el centro artístico musical más reaccionario de Europa. Allí se fomentaba la aridez académica y se hizo célebre por ignorar cualquier avance en el lenguaje musical. El nombre de Debussy era anatema y, desde luego, Stravinsky fue considerado otro “diablo en música”, lo cual reflejaba las opiniones retrógradas de d’Indy. Eso hizo que quienes pasaban por la Schola Cantorum vivieran en el pasado e ignoraran las corrientes revitalizadoras de las tendencias musicales modernas. Claro que algunos de sus alumnos, como Varèse y Milhaud, supieron librarse de esas cadenas, pero esa no fue la tendencia general.

Por tanto, la obra de Uribe Holguín, siempre correcta, a pesar de no significar ningún avance musical, en sí misma fue meritoria y se escucha con interés. Lo cierto es que fue el primer músico importante que tuvo el país y la efemérides que se menciona hubiera debido ser la base para que se presentara algo de su obra y se recordaran sus logros, que impulsaron importantes instituciones musicales colombianas. Lo mencionado es una verdadera injusticia y ojalá que cuando haya la oportunidad se acuerden de otras importantes figuras en la cultura nacional.

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Sebastián(54861)10 de julio de 2021 - 12:42 a. m.
[II de II] 2. No comparto su opinión: «Lo cierto es que fue el primer músico importante que tuvo el país» (§3), conque el primer músico importante de Colombia fue Pedro Morales Pino (Cartago, 22 febrero 1863 - Bogotá, 4 marzo 1926), quien incluso hizo más aportes a la música colombiana que Uribe Holguín y que cualquier otro músico, aunque esto tiene buen grado de subjetividad y gusto.
Sebastián(54861)10 de julio de 2021 - 12:42 a. m.
[I de II] 1. Censuró con tino que «las entidades culturales colombianas… hayan dejado pasar inadvertido el cincuentenario de la muerte del ilustre músico colombiano Guillermo Uribe Holguín» (Bogotá, 17 marzo 1880 - 26 junio 1971), mas omitió indicar cuándo se cumplió el cincuentenario.
Carlos(58915)09 de julio de 2021 - 05:07 p. m.
Que cultura pueden tener estos gobiernos ?. Gracias por su ilustración.
Atenas(06773)09 de julio de 2021 - 04:28 p. m.
Tamaño olvido por uno de los nuestros es lo propio de pueblos, o individuos, ingratos. Y suele ocurrir con frecuencia en estas latitudes. De fortuna, Ud, Don M.Drezner, del caso se ocupa, y su reconocida trayectoria y admiradas luces sobre el maestro Uribe Holguín se posan. Se reitera, "Es preferible ser elogiado por las pocos sabios q' vituperado por los muchos zafios".
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