Como siempre, el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo anunció en este mes su programación para el año entrante y, como siempre, esa programación es de altísima calidad y con mucha cosa atractiva para los amantes de la música y las artes escénicas. Ella puede ser consultada por los interesados, pero aquí quiero destacar algunos eventos excepcionales desde mi punto de vista. Uno de ellos será la presentación, por primera vez en muchos años en la ciudad, del Réquiem de Verdi; alguno dijo que era la más operática de las músicas litúrgicas y una obra maestra indudable. Habrá también dos sinfonías de Mahler, la Tercera y la inefable apodada Resurrección, una cumbre del repertorio sinfónico.
El arte lírico será representado por La traviata, Così fan tutte de Mozart y lo que anuncian como una adaptación de la zarzuela Luisa Fernanda. Ojalá que presenten esas obras como lo quisieron sus creadores y no como caprichos de sus directores escénicos.
Dudamel estará al frente de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles en su gira de despedida, ya que, como se sabe, fue nombrado director de la Filarmónica de Nueva York; vendrá ahora sí la Orquesta Nacional de España y también una de las agrupaciones barrocas más importantes, llamada La Grande Chapelle. Entre lo que ofrecerán las agrupaciones nacionales, además tocarán el Concierto para violín de Alban Berg, obra conmovedora y única. Para terminar el año se verá el ballet navideño clásico El cascanueces y habrá otros dos, uno basado en obras de Monteverdi y otro, en la novela de Tolstói Ana Karénina.
Lo descrito es solo una fracción de lo prometido y eso muestra que 2024 será año excepcional desde el punto de vista de lo que se verá. Falta por conocer lo que presentarán el Colón y otros escenarios, pero ya con lo dicho se puede predecir que los aficionados tendrán muchos platos exquisitos.
