Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
«No es nada». La semana pasada escuché esa frase y de inmediato la asocié con una consulta que vi en los comentarios de este espacio en la web: ¿qué pasa con la doble negación en español? Con la frase mencionada, ¿estamos diciendo que el objeto en cuestión es algo o es inexistente?
La aparente confusión se resuelve al mirar las particularidades de la llamada «alternancia negativa», que, según la Gramática, es la que permite tener pares como «No vino nadie», pero también «Nadie vino». En general, como lo ha explicado Español al día, si adverbios como «jamás» o «nunca», o indefinidos como «nada» o «nadie», van antes del verbo, no se acompaña la frase con el adverbio negativo «no». Ese es el caso de «Nadie vino». Pero si ese tipo de palabras van después del verbo, entonces tiene sentido añadir la negación «no»: «No vino nadie». Como lo resume la Real Academia Española: en vez de cancelar el sentido negativo, ese tipo de construcciones lo refuerzan. Por lo tanto, volviendo al ejemplo inicial, si lo que queremos expresar es que algo, por pequeño que sea, existe, deberíamos decir «Es algo» y no «No es nada».
En otros temas, hace algunos días encontré un titular en el que se referían a Humberto de la Calle solo por su apellido. Sin embargo, la preposición «de» aparecía en minúscula. Aunque es correcto que las preposiciones o los artículos de los apellidos (si los tienen) vayan con minúscula inicial cuando acompañan al nombre de pila, no es así cuando se encuentran solos. El titular correcto, entonces, se habría referido a «De la Calle».
