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El país de las maravillas

Para no repetir la historia

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Mario Morales
23 de noviembre de 2022 - 05:30 a. m.
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Sí, ganarse la confianza. Ese es el principal reto en las negociaciones de paz con el Eln, columna vertebral de la paz total y, a su vez, uno de los pilares de la apuesta del Gobierno Petro.

Primero, la confianza de una guerrilla reacia, curtida, que decide de manera reticular, que entiende la guerra como modus vivendi sin aspiraciones de alcanzar el poder, mientras copa territorios y hace crecer sus ejércitos, y que sabe que se le ha dado vocería y reconocimiento.

Luego, la confianza de la opinión pública acostumbrada, en los siete procesos previos, a que quien negociaba era la derecha altisonante a nombre de los poderes y privilegios tradicionales. El desafío es hacer entender que, si bien es un Gobierno de izquierda el que dialoga, no significa condescendencia ni pusilanimidad, y que no representa a un partido o ideología sino al Estado y a la institucionalidad que juró defender.

En tercer lugar, la confianza de los sectores más recalcitrantes que siguen añorando la eliminación del adversario como única solución. Para eso están los representantes de la fuerza pública, aunque ojalá no en el papel proverbial de antípodas o palos en la rueda, sino de aporte y equilibrio como actores del conflicto.

Y, claro, la confianza de empresarios, ganaderos y representantes del sector productivo para que sean emisarios y garantes de que no se negocia, como se sabe, el sistema político en abstracto ni el modelo económico. Hábil fue el presidente al convocar a José Félix Lafaurie, así sepa, como el resto del país, que tarde o temprano pateará el tablero, fiel a su talante. Del Centro Democrático o de los ultraconservadores mejor ni hablar, aprovecharán su extremismo para hacer campaña y encontrar los liderazgos que no tienen.

Para ganar esa confianza hará falta discreción, sigilo en las comunicaciones, ponderación, respeto jerárquico entre los negociadores, comunicación política asertiva y mucha pedagogía, aunque ya esté tarde para ello; pero sobre todo, la decisión inmediata de los elenos de silenciar fusiles y parar acciones bélicas. Sin eso, lo demás es utopía.

@marioemorales y www.mariomorales.info

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