He sumergido mis manos en la masa, he probado países en un bocado, he puesto a prueba mi creatividad, he tenido estrés por entregar un buen plato a un único comensal a una hora exacta. Me he puesto en los zapatos del chef y he retado mis sentidos.
La cocina se ha vuelto una aliada del encierro, su disfrute puede jugar a desatar momentos de éxtasis, es terapia para curar la soledad. Disfrutar de pequeños placeres ha sido la forma de librar la batalla en contra del aburrimiento y el estrés que genera el encierro, por eso conocer el mundo que se cocina detrás de los platos que disfrutamos en un restaurante puede ser un plan no solo de aprendizaje, es el inicio de un viaje sin pasaporte que nos lleva a recorrer países sin salir de la cocina, nos crea conciencia culinaria.
Uno de los emprendimientos que ha adaptado su cocina a la realidad de la pandemia, es Thai & Sushi, un restaurante que lleva años demostrando porque a la hora de probar un buen maki es un referente de sabor y calidad. En cuarentena nos han invitado no solo a seguir probando su menú, sino a ponernos el delantal y jugar a ser chefs por un día y apostar a hacer sushi. Un plato preferido por muchos a la hora del domicilio, pero desconocido en términos de preparación, lo que hace de este encierro el momento perfecto para aprender de sus ingredientes y su elaboración. @thai.sushi cuenta con un kit ideal para aprender o simplemente cocinar un buen sushi, este kit cuenta con todo lo que necesitas para armar un rollo sin preocuparte por la cocción del arroz. Si prefieren el pad thai, el segundo kit es ideal fácil y rápido para preparar, pasta, huevo, cerdo, maní y verduras hace parte de este delicioso plan que puede salvarnos un día de cuarentena.
Otro emprendimiento que no solo ha sido resistente a la crisis, sino que ha innovado en su carta para brindar una experiencia en casa, es Luciana Cocina (@luciana_cocina), un restaurante con técnicas europeas pero con insumos locales de muy alta calidad, donde lo orgánico es protagonista. Su chef Juan Sebastián Franco, re diseñó su estrategia no solo financiera sino gastronómica, pues su carta debía adaptarse a un nuevo público, su menú resiliente ha sido la forma de seguir abiertos, y el reto se volvió no solo sacar buenos platos, sino crear nuevos para que la gente en su casa disfrute de la calidad de sus platos a buen precio.
Para confirmar su frescura y sabor, la lasagna de estofado de res, en cerveza negra y cacao, es sin duda un plato de dioses, su cobertura perfectamente gratinada, es la puerta a la suavidad de cada una de sus capaz, que deja saborear la carne sin dejar que el queso invada el bocado, un plato que mezcla lo mejor de la cocina italiana con exquisitos toques de autor que no se compara con otras. Otro plato es el curry de lentejas con lentejas crocantes, la mejor forma de agregar proteína a nuestro día es con este delicioso plato que además es muy saludable. La frescura de sus ingredientes que se dejan ver y saborear en una ensalada de encurtidos los cuales son hechos por ellos. Para estar en los zapatos del chef, probé los ravioles de ratatouille que me afrentaron a la estufa para degustar un plato hecho por mí, con ingredientes casi listos de Luciana, una experiencia sin duda para recomendar.
Este es el mejor momento para conectar con el recolector, con el cocinero, y con cada ingrediente que justo como los humanos por si solos no tienen tanta fuerza como cuando los unes de manera estratégica con un buen fin.