Publicidad

Comisión histórica del refrito

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Nicolás Rodríguez
20 de septiembre de 2014 - 02:21 a. m.
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

El comentario generalizado que resume el debate parlamentario hecho por Iván Cepeda es que se trató de un refrito.

 Dicho por políticos, periodistas, analistas, seguidores de Uribe y hasta detractores. Al parecer, todo lo que el senador dijo ya se sabía. Para nadie era un secreto. La prueba última y definitiva que todos esperaban, nunca apareció.

No hubo abrazos fotográficos con los apóstoles. Ni firma comprometedora en algún pasquín. Ni siquiera un esperanzador narcocasete. Cepeda se limitó a una serie de informaciones que cualquiera con algo de tiempo puede rastrear en la propia prensa. Si exageró o condimentó es algo que se puede revisar. Pero lo que llaman refrito es un plato todavía tibio.

En Colombia el refrito es aburrido por naturaleza. A nadie le gusta un plato sin novedad y una buena dosis de espectáculo. Eso volvió a quedar claro tras el debate. Sin embargo, no hay que confundir la antigüedad con su fecha de caducidad. Que el refrito sea viejo, no lo hace menos sabio. O nutritivo.

Al revés. Justamente porque los supuestos vínculos del expresidente Uribe con el paramilitarismo entran en la categoría de refrito deberíamos acercarnos con renovada curiosidad, respeto y devoción. Pues el refrito condensa una buena cantidad de lo que somos. Es nuestra piedra filosofal. El acontecimiento síntesis. La medida que marca el paso del tiempo. El mojón. La coyuntura. La estructura.

El refrito del miércoles no ha dicho todo lo que tiene para decir. Tal vez por eso es que vuelve una y otra vez. Quizás para enseñarnos que Uribe es una nota de pie de página en toda esta historia. Vuelve para recordarnos que el refrito se puede incluso cocinar sin Uribe. Que la mayoría de las personas eligieron una y dos veces una solución urgente frente a la guerrilla en la que los paramilitares no eran mal vistos. Y que no está para nada claro si lo volverían a hacer.

Conoce más

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.