Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Desconozco si la unidad investigativa de Noticias Caracol cometió algún error de forma o contenido a la hora de publicar la historia del apoyo de un narcotraficante a la campaña de Colombia Humana en Yopal (Casanare). Como sea, la reacción del presidente es exagerada.
Admiro el periodismo que lidera Ricardo Calderón. Gracias a sus valientes trabajos anteriores, hubo avances en temas de parapolítica, falsos positivos y chuzadas. Graduarlo de uribista y vendepatrias por continuar con su trabajo en una administración diferente al eterno periodo uribista es infantil, además de peligroso (también los uribistas exigían silencio una vez Uribe, emberracado y a conveniencia, movía los hilos del Estado de opinión).
Supongamos, sin embargo, que en efecto incurrieron en alguna ligereza o que de plano se cometieron injusticias. Supongamos que mañana los responsables deciden rectificar. ¿Sería esta, todavía, una razón de fondo para argumentar, como lo hace el presidente Petro en sus trinos, que los dueños de los medios de comunicación son todos iguales y están aparentemente unidos contra el Gobierno? ¿Y ello, más encima, para sabotear investigaciones sobre corrupción?
¿Qué parte del liberalismo que ejerce este periódico, muchas veces en defensa de sus ideas de cambio y justicia social, no ha leído el presidente?
Algo hay de Vicky Dávila a Ricardo Calderón. La burda propaganda de Dávila no es comparable con el ejercicio investigativo de Calderón. Estamos ante dos especies bien diferentes. De Dávila se espera cualquier cosa. De Calderón no. Si en Presidencia no ven la diferencia, nadie está a salvo.
Con un poco de honestidad intelectual, por lo demás, Petro podría recordar el rol crucial del periodismo en sus debates como congresista. En sus épocas doradas, cuando ganó reconocimiento por atreverse a decir verdades, el conocimiento construido por los medios de comunicación sí le era valioso. Hoy parecería creer que los medios de comunicación simplemente son órganos de dominación.
¿Esta pataleta es verdadera y debemos preocuparnos o se dirige únicamente a avivar la calle?
