La corbata es una prenda de vestir que pone elegante al caballero. Sin embargo la rebeldía universitaria hace que algunos jóvenes no la usen y prefieran tener desabrochada la parte superior de la camisa o ponerse suéteres de “cuello de tortuga” que, por cierto, han caído en desuso. Cuando los años pasan y el joven concluye su carrera universitaria y, sobre todo, si es abogado, se viste con corbata.
Los arquitectos están por fuera de esta categoría, como también los que siguen en su rebeldía. Tenemos ejemplos muy conocidos como ‘Lucho’ Garzón, el economista Luis Jorge Garay y el recién posesionado alcalde Gustavo Petro.
Pues me cuentan que en noviembre pasado, recién elegido alcalde, fue invitado al Gun Club y en la recepción, muy amablemente, le comentaron que allí está prohibido entrar sin corbata. Con no muy buen gusto le tocó conseguir una para ponérsela. Días después, en esa misma condición de electo, fue a visitar al presidente Santos y, cumpliendo el protocolo, se puso corbata. Cuál no sería su sorpresa cuando el jefe del Estado apareció sin esa prenda, como acostumbra hacerlo de vez en cuando. (Al actual mandatario varias veces lo hemos visto así, rompiendo la tradición de sus antecesores, vestido de sport y aun con la camiseta de la selección Colombia). Pero algo va de Santos a Petro.
‘Lucho’ Garzón, decía atrás, es de los que han continuado con su rebeldía de sindicalista de no usar corbata. Una de las pocas veces que ha aparecido con esa prenda fue hace unos meses cuando hizo parte de una comitiva presidencial al exterior. Muy tieso y muy majo apareció de corbata, para sorpresa de muchos. Ahora, cuando su Partido Verde se siente un poco más maduro, se le ven las ganas a ‘Lucho’ de romper su tradición.
“Entramos a la coalición de gobierno sin misterio y sin ministerio”, dijo cuando anunció su apoyo al programa de gobierno de Santos. Lo repitió la semana pasada, pero aclaró que si designan a alguno de ellos, lo pensarían. La verdad es que están muertos de las ganas. Me parece que con un nombramiento, ‘Lucho’ hasta se pone corbata y es posible que seda.