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No rotundo

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Pablo Felipe Robledo
10 de julio de 2024 - 05:05 a. m.
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A principios del próximo mes el gobierno -por llamarlo de alguna manera- del presidente Gustavo Petro llegará a su primera mitad. Sí, esa primera mitad que, en términos generales para cualquier presidente, viene acompañada de popularidad, ejecutorias importantes y bastante respaldo nacional. En el caso de Petro, el tránsito por la mitad de su gobierno no dejó nada bueno, ni siquiera esperanzador, y nos ha hecho pensar a millones de colombianos que en realidad ya tocamos fondo. El ejercicio del poder presidencial para Petro y sus alfiles no ha sido más que una payasada que ha afectado la vida de toda una nación.

El presidente Petro ha desperdiciado, con mucha pena y poca gloria, de una forma nunca vista, los años de luna de miel en el ejercicio del poder presidencial, y lo ha hecho sin ninguna ejecutoria significativa que de verdad sirva para transformar este país. De aquí en adelante todo es más difícil e incierto.

Sabedor de que no ha hecho nada transformador, salvo consolidar el odio de la mayoría hacia él y lo que representa, Petro incrementa la estrategia de poner en vilo al país con la temida y temible idea de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente para cambiar una cantidad de cosas interminables con estirpe refundacionista, como a él le gusta, pero que por ahora no necesitamos.

Nadie sensato quiere embarcarse en una constituyente, pues los actuales problemas de Colombia son otros bastante diferentes como para dejarse distraer de un gobierno con una popularidad que llega raspando al 38 %, en decadencia y contra el reloj, y sin proyecto serio en ninguna materia relevante.

La llegada de viejos zorros de la política nacional al gobierno de Petro y el mantenimiento de otros tantos que están desde el principio y que le juegan a la burocracia sin importar quién es el patrón, deja entrever la obsesión de Petro de meterle a su mala idea de una constituyente, políticos sin hígado ni principios, pretendiendo con ello dar la idea de estar sumando en vez de restando, como hasta ahora nos ha tenido Petro acostumbrados, y generar la falsa sensación de llegar a acuerdos con la sociedad que ambienten la cacareada constituyente.

Todos los colombianos debemos ser parte de la oposición mayoritaria a la loca idea de una constituyente, cuyo único real propósito es la vergonzosa idea de perpetuar a Petro en el poder. Lo demás es jugar con candela, y flaco favor le hacen al país algunos personajes cediendo terreno para viabilizar una constituyente, vía Congreso o vía decreto, pero al fin y al cabo constituyente.

Importante la futura labor de la justicia y las altas cortes, que tienen la misión de recordarle al Palacio de Nariño que su inquilino es transitorio y no perpetuo, y que la Constitución de 1991 es lo que es y no lo que Petro quiere que sea. La Corte Constitucional, desde semanas atrás, ha venido dando mensajes importantes que le recuerdan al Gobierno y a sus principales alfiles que eso de cambiar de Constitución o modificarla solo es posible a través de los medios contemplados en propia Constitución y no de cualquier manera.

Claramente me uno a la idea de que no puede despegar la idea de una constituyente. Pero voy más allá, el no es rotundo y tajante; no hay ni que discutirlo.

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Gabriel(69029)13 de julio de 2024 - 12:13 p. m.
Lamentable la etica y moral que se refleja en columnistas de este tipo, anquilosado, viviendo y bebiendo de las mentiras y el odio del discurso de los sectores de ultraderecha. Un enemigo desleal y sin altura, más cerca del fascismo que de las posiciones democráticas, o progresistas. Negar logros en el primer año como la reforma tributaria, la aprobación del plan de desarrollo y en el segundo año la aprobación de la reforma pensiónal y el inicio + de la laboral, es una canallada.
Humberto(12832)11 de julio de 2024 - 08:38 p. m.
A este pisco jamás le ha interesado comprender lo que diga el otro, solo sabe manifestar sus odios. Debe de mantener una gastritis terrible. Tome cristales de sábila en ayunas o, si prefiere, conforme a su talante, ponzoñas de escorpión
rodrigo(82201)11 de julio de 2024 - 03:15 p. m.
Pablito y sus obsesiones e vive envenenado todas las sanciones que le puso a Petro ni fu ni fa ese es el origen de su fobia
César(54524)11 de julio de 2024 - 01:36 p. m.
JAJAJJAJAJJAJAJJJAJAJJAJJAJJA
Jose(79omw)11 de julio de 2024 - 01:01 p. m.
Creo que la estrategia del espectador de mantener al Sr. Robledo como columnista, es generar el odio hacia las estupideces que escribe (casi siempre) y el poco cariño de los de extrema derecha como el, por sus columnas. Empezando que, Petroski no ha sido la solución a los problemas que tiene nuestra sociedad, eso lo sabíamos. Pero destilar odio cada semana hacia el presidente (guste o no) que ha medio tratado de balancear las reglas de poder en el país, es algo incomodo.
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