De malo a peligroso el rumbo del Gobierno. La alocución con tono retador en la que el presidente se hizo acompañar de sus ministros, pero cuidándose de que en primera fila estuviera la altiva y agresiva Carolina Corcho, dejó patentada la intolerancia que se respira en el epicentro del poder.
Lo que hizo Petro fue botar a Alejandro Gaviria por no estar de acuerdo con la reforma a la salud y de paso respaldó a la Corcho, una señora cada vez más insoportable. No era necesario ponerla al lado del presidente con su expresión endurecida celebrando la caída del ministro Gaviria, a quien derrotó, pero no venció. Lo sacó del Gobierno, pero...
Conoce más
Temas recomendados:
Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
