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Tatiana Acevedo Guerrero
09 de julio de 2023 - 02:00 a. m.
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El Movimiento Ciudadano, que existió brevemente en la Barranquilla de comienzos de los noventa, se inspiró en la Teología de la Liberación, un enfoque crítico de la desigualdad nacional que cuestionaba la actitud de las élites políticas y económicas. Viviendo y predicando en el suroeste de Barranquilla, el cura Bernardo Hoyos cuestionó la pobreza de los sures de la ciudad, la explotación y la falta de servicios públicos. En sus sermones criticaba no solo los abusos de los grupos criminales, sino también del propio Estado. El movimiento encabezó manifestaciones contra las familias liberal y conservadora (Name y Gerlein). En colaboración con liberales disidentes y sindicalistas que trabajaban y vivían en el sur barranquillero, se lanzaron a las elecciones para concejos y alcaldías. Alcanzaron, para sorpresa de todo el mundo, mayorías.

A los pocos días de ganar la elección, el nuevo gobierno local visitó barrios del suroeste, que era el sector más abandonado y pobre de la ciudad. La lideresa barrial y presidenta del Concejo, Janeth Suárez, junto con otros funcionarios, analizaron sus problemas de agua con la ayuda de las juntas de acción comunal y anunciaron que iban a extender redes de infraestructura para llevarlas a estos barrios. Se le otorgaron 15 días a la entonces empresa prestadora del servicio de agua Triple A para limpiar los canales de drenaje y comenzar a recolectar los desechos sólidos en los barrios del sur.

“Les pedimos a los gerentes de Triple A y a otros que se alejaran del norte de la ciudad y vinieran al barro. Porque no conocen la miseria en la que vive la gente en el suroeste (…) tienen que asumir el desafío que la ciudad les exige: estamos en medio de una emergencia sanitaria y necesitamos entender la gravedad de la situación para la comunidad”, declaró la Alcaldía. El gobierno local, que como estipulaba entonces la ley estaba en el poder por dos años, destinó fondos importantes y siguió de cerca los plazos en la construcción de obras de infraestructura. Durante los últimos meses del gobierno, los funcionarios de la ciudad presionaron a los contratistas para que trabajaran más rápido, “incluso llamando a los ingenieros a sus casas”.

Hubo quejas y más quejas por cuenta de gremios y sabios de siempre. Se les tildó de antitécnicos y se les acusó de desordenados. A pocos días de salir del poder, este gobierno local se cercioró de que la Triple A hubiese terminado algunas de las redes de agua y alcantarillado en muchos de los barrios del suroeste.

La gente en esos barrios (que conforman la mayoría de la ciudad) se acuerda siempre de esos dos años. Solo dos. Pese a que en los barrios populares de las ciudades nuestras impera la desconfianza frente a la acción del Estado (y a que tiempo después el cura Hoyos se convirtió en un corrupto más), habitantes de este sector barranquillero recuerdan el gobierno del Movimiento Ciudadano. Desde entonces tienen agua. En esos pocos meses “llegó el Estado”. Se sembró un futuro más concreto y se mejoró sustancialmente la vida cotidiana.

Cunde el cinismo entre quienes nos dedicamos a estudiar la política colombiana. Sobre todo la más reciente. La trayectoria del Movimiento Ciudadano nos enseña, sin embargo, que no se necesita mucho tiempo para cambiar el curso de la vida de una población. El pasado 30 de junio, en el marco de la visita a La Guajira, la vicepresidenta Francia Márquez se posesionó como ministra de la Igualdad y la Equidad. Confío en que, así sea un entusiasmo breve como vaticinan la prensa y los cacaos, el paso de Márquez en el poder invierta en los derechos de las poblaciones y se obsesione con reparar a poblaciones que viven los coletazos de la desigualdad.

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Hugo(14000)09 de julio de 2023 - 11:10 p. m.
La comparación de lo hecho por Hoyos con lo que podría hacer Francia no es apropiada.El vivió en esos barrios y los benefició antes de llegar a la alcaldía.La plata,salió de la misma ciudad para un destino específico y gobernaba solo la ciudad.En cambio la Guajira es un territorio muy extenso con problemas y necesidades de todo orden donde ella no ha vivido ni es autoridad solo para ese departamento y los recursos los conseguiría ,si acaso,quitándolos a atender a otros pobres del país entero.
ERWIN(18151)09 de julio de 2023 - 10:13 p. m.
Asi mismo ..el padre Hoyos le cambio la cara a todo esa gente ..mando a pavimentar todas las calles ..lastima que no afguanto los aplausos el padre ..se torcio ..dio papaya y lo inhabilitaron ..sin pelos en la lengua .
Felipe(dw15k)09 de julio de 2023 - 09:30 p. m.
Gracias por sus columnas bien escritas que demuestran conocimiento, investigación y contexto pertinente.
jorge(3766)09 de julio de 2023 - 07:35 p. m.
Esperemos que sí
Dario(44002)09 de julio de 2023 - 07:27 p. m.
Tatiana, es que cuando uno se forma para servir, primero HACE LO NECESARIO y luego lo hace en el menor tiempo posible.....
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