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Trump es altamente inmoral, corrupto, y racista. Pero si uno presta atención al centro estadounidense y colombiano, pareciera que es el primer presidente en tener esos y otros defectos. No podemos tragarnos entera esa propaganda: la presidencia de Estados Unidos es imperial y, por lo mismo, exige altas dosis de inmoralidad y corrupción.
Quiero darles algunos ejemplos.
Bush fue culpable de más de un millón de muertos, 4.5 millones de desplazados y miles de torturados en Irak. Además, bombardeó y destruyó uno de los países más pobres del mundo: Afganistán (rechazando, por cierto, la oferta talibán de entregar a Osama bin Laden, siempre y cuando cesaran los bombardeos).
Obama se ensañó con los inmigrantes sin papeles, deportando más de tres millones (una cifra superior a la de cualquier otro presidente). Por si fuera poco, su guerra con drones fue responsable de por lo menos 324 muertes civiles. Barack incluso llegó a decirles a sus secretarios que había descubierto durante su presidencia que era bueno matando gente.
Además, el expresidente inició una guerra en Libia sin la autorización del Congreso, con resultados devastadores para la población local. Decir que dicha guerra fue una catástrofe para quienes la sufrieron es subestimar lo que pasó. El chiste centrista de que el peor crimen de Obama fue haber usado un traje beige es ofensivo para todos quienes padecieron y murieron bajo su presidencia.
Alguien podría decir que los demás presidentes al menos no habían usado el comercio como arma política. Pero eso no es cierto. Recuerdo muy bien que la amenaza de la descertificación en los 90 venía acompañada de posibles sanciones económicas para Colombia. Trump se diferencia en el alcance, pero no en el uso del arma en sí.
Otro podría decir que nadie había roto el Estado de derecho como Trump al enviar a los migrantes sin papeles a El Salvador. Eso tampoco es cierto. Nixon (Watergate), Reagan (Irán-Contra), Bush (despido de fiscales en 2006), Obama (ejecuciones extrajudiciales) y otros incumplieron y manipularon la ley cuando se les vino en gana. Me parece más preocupante que Trump envíe gente a campos de concentración que el hecho de que eso mismo sea ilegal.
También alguien podría señalar que nadie había tratado tan mal a los turistas. Sí ha empeorado la situación, pero sobre todo porque por primera vez están humillando a los turistas blancos como si fueran del Sur global. Por ejemplo, el gobierno de Trump ha detenido a turistas alemanes y canadienses durante días, en condiciones indignas, y sin explicación alguna, como a cualquier colombiano durante la era Bush.
Como decía Chomsky, si las leyes de Núremberg (las que se usaron para juzgar a los nazis) se aplicaran hoy en su país, todo presidente estadounidense post 1945 hubiese sido ahorcado. Eso no quiere decir que los anteriores hubiesen sido santos. Estados Unidos no llegó a tener dimensiones continentales a partir de políticas pacíficas y humanitarias. ¿Y ya se nos olvidó el papel de Teddy Roosevelt en la independencia de Panamá?
Trump sin duda es peor que otros presidentes en algunos aspectos clave. Producir una crisis económica al poco tiempo de recibir un país boyante no es poca cosa. Negar el cambio climático es peor aún. Trump es incompetente y se rodea de incompetentes. Pero entre los presidentes gringos no es excepcional en su maldad ni en su corrupción.
Tal vez sí en su narcisismo y estupidez.
