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No caer en la trampa en Guatemala

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04 de junio de 2025 - 05:00 a. m.
Nadie en Colombia debería caer en la trampa de hacerles el juego a quienes tanto daño le han hecho a Guatemala.
Nadie en Colombia debería caer en la trampa de hacerles el juego a quienes tanto daño le han hecho a Guatemala.
Foto: EFE - Mauricio Dueñas Castañeda / Carlos Ortega
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Tienen muy corta memoria los colombianos que celebraron la orden de captura contra el exministro de Defensa, Iván Velásquez, y contra la actual fiscal general de la Nación, Luz Adriana Camargo. O, tal vez, solo muestran una preocupante ignorancia sobre la historia reciente y no tan reciente de Guatemala, nuestro país hermano, que ha sido secuestrado por la corrupción y estuvo a punto de tener un golpe de Estado en las pasadas elecciones. Sin el contexto adecuado, no se puede comprender por qué la decisión de un tribunal en ese país contra nuestros connacionales no es más que un intento más por silenciar a quienes han luchado contra la impunidad en ese país. El rechazo de Colombia debe ser vehemente y sin ningún tipo de atenuante.

Velásquez y Camargo hacen parte de la historia de Guatemala. Ambos fueron miembros de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), que desde 2008 hasta 2019 le mostró al mundo cómo se puede combatir la corrupción con investigadores disciplinados, rigurosos y transparentes. El éxito de la CICIG fue rotundo, así haya un sector de la derecha internacional que busque proponer una historia revisionista. Las cifras hablan por sí solas. Durante los años de funcionamiento, se investigaron más de 70 estructuras criminales de alta complejidad, se llevaron más de 120 casos de alto impacto, se realizaron más de 300 condenas y hasta se llegó a investigar a la familia del entonces presidente Jimmy Morales. Por eso la decisión fue cerrarla sin miramientos, en un acto de cobardía y de complicidad con la impunidad.

Contrasten ese antecedente con las personas que ahora buscan cazar a Velásquez y a Camargo. Rafael Curruchiche, jefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) en Guatemala, está en la lista de funcionarios corruptos de los Estados Unidos y también ha sido denunciado por la Unión Europea. En 2023, cuando Bernardo Arévalo dio la sorpresa en las elecciones y se proyectó como el posible próximo presidente, Curruchiche lideró el proceso judicial que buscaba desconocer la democracia y dar un golpe de Estado. Los lectores asiduos de estas páginas también recordarán que hace un tiempo hablamos del periodista José Rubén Zamora Marroquín, quien lleva más de mil días detenido sin cargos en su contra por cometer el terrible delito de ser crítico de la clase política y empresarial de Guatemala, que tiene lazos con Curruchiche. ¿Es ese el adalid de la justicia que algunos miembros de la oposición colombiana buscan ahora enaltecer?

Las acusaciones contra Velásquez y Camargo son ridículas. Palabras más, palabras menos, dicen que se aliaron con miembros de Odebrecht para evitarles sanciones. Cuando la CICIG fue clave, precisamente, por llevar a cabo investigaciones de casos de corrupción de alto nivel. No se le puede dar juego a la Fiscalía de Guatemala, que ha buscado destruir el Estado de derecho en el país centroamericano. Por eso el gobierno de Arévalo no se guardó adjetivos cuando se enteró de lo ocurrido con Velásquez y Camargo. En un comunicado, el presidente dijo que la Sala de Apelaciones que emitió la orden de captura no cuenta “con respaldo en el ordenamiento jurídico nacional e internacional” y que “estas medidas carecen de sustento legal y vulneran el acuerdo entre la Organización de las Naciones Unidas y el Gobierno de Guatemala relativo al establecimiento de una Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG)”. No nos sorprende. Nadie en Colombia debería caer en la trampa de hacerles el juego a quienes tanto daño le han hecho a Guatemala.

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Tayrona(31467)05 de junio de 2025 - 08:57 p. m.
Pues es que con ese apellido Curruchiche, que más se puede esperar de este hombrecito acomplejado y acobardado por culpa del Curruchiche. Y además marioneta de los corruptos que tanto allá como acá no dejan gobernar?. Uribe y Curruchiche?; se deben llevar muy bien este par de bandidos.
Fernando(6ytmj)05 de junio de 2025 - 03:06 p. m.
Desafortunadamente típico de nuestra derecha colombiana. Utilizar cualquier noticia o hecho por mas absurdo y burdo que sea como este de la Fiscalía guatemalteca aliada de una clase absolutamente corrupta, para intentar enlodar a personas con las que no están de acuerdo. Lamentable lo de esta clase política nuestra que al final termina mostrando su aceptación implícita a la corrupción como objetivo.
Sentipensante(72875)05 de junio de 2025 - 02:56 a. m.
Totalmente de acuerdo. En Guatemala la Fiscalía está imponiendo el terror y la dictadura. Persigue, señala, y juzga! sin fundamento a cualquier persona que critica y se opone al establishment que ha mal gobernado durante años ese país.
Mario Delgado-Noguera(84921)05 de junio de 2025 - 02:46 a. m.
La corrupción en Guatemala viene de tiempo atrás, con la injerencia de Estados Unidos y de la United Fruit Company,: la sufrieron el padre del presidente Arévalo y Jacobo Arbenz como la narra magistralmente Vargas LLosa en su novela Tiempos recios. https://mariodelg.blogspot.com/2024/02/tiempos-recios-en-guatemala.html
Gilberto R.M.(54899)05 de junio de 2025 - 02:38 a. m.
Tenía razón un periodista cuando bautizó a la pseudo/periodista Vicky Dávila como LA RABO DE AJÍ.
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