Treinta años después del fatídico año 89 —el del magnicidio de Galán, la bomba al avión de Avianca, la bomba al DAS en Bogotá, el asesinato selectivo de líderes de la Unión Patriótica, de jueces y de cientos de policías— algunos de los que tienen una memoria viva de lo que pasó nos advierten que estamos en peligro de revivir esa historia.
Temas recomendados:
Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación