Publicidad

El deber moral de Petro ante nuevo pulso con Trump

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Cartas de los lectores
21 de octubre de 2025 - 05:00 a. m.
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

A propósito del editorial del 20 de octubre, titulado “Las mentiras de Trump se responden con mesura”. Según el DANE (2023), Colombia cuenta con 52’314.000 habitantes. Dada la diversidad y pluralidad cultural del país, todos estamos cobijados por la misma Constitución Política y la ley. El presidente de la República es un ciudadano que, por mandato popular, asume la potestad de gobernar; no obstante, se encuentra bajo la sombrilla del acatamiento constitucional. En este sentido, los artículos 188 y 189 de la Constitución son muy específicos al detallar sus atribuciones y responsabilidades.

Las relaciones internacionales demandan tacto, pues se establecen con países que también ejercen su autodeterminación; de ahí la importancia de la diplomacia. Siguiendo a Marshall McLuhan, vivimos en tiempos de “glocalidad” (lo global y lo local interconectados), y de acuerdo con Edgar Morin, en una etapa de “conciencia planetaria”. Por tanto, hoy es escaso hallar un país completamente autosuficiente desde el punto de vista económico. De allí que deban utilizarse los mecanismos diplomáticos adecuados para superar las crisis que, aunque inevitables, pueden manejarse mediante el diálogo internacional.

La actual crisis diplomática no es entre Colombia y Estados Unidos, sino entre el presidente Gustavo Petro y el presidente Donald Trump. El mandatario colombiano, al dejarse llevar por sus pasiones, podría arrastrar al país hacia dificultades económicas difíciles de prever. Actualmente nos encontramos en temporada de cosecha cafetera, así como en plena recolección de cacao y aguacate Hass, y comenzamos la preparación de tierras para exportar la cosecha de flores en febrero próximo. Cada día, millones de colombianos nos levantamos de madrugada para estudiar, trabajar y producir; esta es la manera en que nos ganamos la vida y llevamos el sustento a nuestras familias. Todo este esfuerzo podría verse afectado si aumentan los aranceles, impactando toda la cadena de consumo.

El deber no solo jurídico, sino también moral, del presidente Petro es deberse a todo el pueblo colombiano. En ello radica la dignidad de su investidura: dejar de lado los personalismos electorales y evitar agitar nacionalismos vanos que, por ser pasajeros, resultan inclementes y peligrosos.

Emel Jiménez Ochoa

Envíe sus cartas a lector@elespectador.com

Conoce más

 

Yimmy Arana Varela(68264)23 de octubre de 2025 - 03:39 p. m.
Muchas gracias!
Mauricio Murcia(05056)22 de octubre de 2025 - 02:22 a. m.
Arrodillado eso es lo que quiere
  • Felipe Cox(18091)22 de octubre de 2025 - 03:50 p. m.
    Para nada Mauricio. Ahí hay palabras de sensatez, una virtud básica de cualquier estadista.
Celyceron(11609)21 de octubre de 2025 - 03:27 p. m.
LA DIGNIDAD, debe prevalecer a las ganancias monetarias.
willy1967(97496)21 de octubre de 2025 - 01:43 p. m.
Y de la columna, el deber moral de Petro? Por Dios es como pedirle peras al olmo; una persona que poco o nada le importa su entorno, su ego y su vanidad le impiden aceptar errores; siempre habrá a quien culpar de su incapacidad e ineptitud y lo peor su séquito le celebra la irresponsabilidad….
willy1967(97496)21 de octubre de 2025 - 01:26 p. m.
A los colombianos nos hace falta valentía, somos el único país que a pesar de haber tenido presidentes incapaces o elegidos de manera muy cuestionada aún así se les ha permitido culminar sus mandatos, los casos de Samper, Duque y Petro son elocuentes;. Petro cumple con todos los requisitos: inepto, corrupto, su campaña superó los topes e ingreso dinero de todos los orígenes. Petro no representa a Colombia, es realmente penoso cada que interviene en foros internacionales, da pena ajena….
  • Chejov(91448)22 de octubre de 2025 - 12:23 p. m.
    A ud le hace falta valentía para reconocer que Petro ha hecho un buen gobierno a pesar de las "vacas muertas" que como los uribistas en el congreso, en los medios, en el empresariado, en las cortes, se han atravesado para impedir que haga las reformas por las que votamos 11,5 millones de colombianos. Me siento orgulloso de un presidente que levanta la voz en los foros internales, dice las cosas de frente, NO SE ARRODILLA.
  • Martha Barrera(9256)21 de octubre de 2025 - 09:16 p. m.
    Falso esté comentario , qué falta de objetividad y pulcritud en sus comentarios Willy 1967. Pena ajena producen su palabrería .
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.