Publicidad

De la Inteligencia Militar

Sigue a El Espectador en Discover: los temas que te gustan, directo y al instante.
Cartas de los lectores
06 de febrero de 2014 - 03:00 a. m.
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

Es entendible que la Inteligencia Militar está en todo su derecho y obligación de enterarse de todo; absolutamente de todo lo que ocurra en el país; y que estén escuchando conversaciones de lo que se hable en La Habana no quiere decir que estén actuando en contra del Gobierno ni en contra de su propio país, a no ser que los temores en los cuales se fundan estas críticas se basen en realizaciones non sanctas que estén ocurriendo allí, cosa que no creo. Es un hecho y es un acto de contrainteligencia justo, apropiado y oportuno que las fuerzas del orden deben ejecutar aunque cause “cosquillas”; precisamente y tal vez haya temores también infundados de parte de los negociadores quienes están tratando asuntos de Estado también dentro del orden legal. Pero sin alharaca; la inteligencia militar está para eso: hacer inteligencia. Lo que en ningún caso constituye algo en contra de lo que el Gobierno se propone y es finalmente constitutivo de una coadyuvante a la acción gubernamental en todos los casos y en todas las operaciones. Para eso es que existe la inteligencia, para ayudar; reitero. ¿Cuáles son los temores?
Fabio A. Ribero Uribe. Socorro.

Norma
Me parece que la editorial Norma está dando un excelente mensaje con su decisión de dejar de imprimir las famosas sensuales y provocativas modelos que venía exhibiendo y, en cambio, poner ilustraciones que estimulen los valores. Más de una entidad y muchas personas venimos convenciéndonos de que no podemos continuar con esta tendencia de exaltación de la mujer como hembra deseable para el sexo, y más bien valorarla en toda su integridad.
Desafortunadamente algunos medios de comunicación (supongo que El Espectador, dada su categoría y principios, no se incluye entre ellos) buscan a toda costa esa baja tendencia por razones de rédito económico, sacrificando los principios de la dignidad de la mujer. Un ¡hurra! para la prestigiosa editorial Norma.


Alfredo Velásquez M. Bogotá.

Envíe sus cartas a lector@elespectador.com.

Conoce más

 

Sin comentarios aún. Suscríbete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.