“Colisión Esperanza”
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Hace cuatro años el centro político se quemó porque Sergio Fajardo y Humberto de la Calle no quisieron tomarse un tinto para ponerse de acuerdo y llegar unidos a la primera vuelta. Con los 400 mil votos de De la Calle, Fajardo habría llegado a segunda vuelta y, quizás, otra habría sido la historia. Se suponía que de ese error el centro habría aprendido. Pero todo indica que no. Aunque para las elecciones de 2022 se conformó una coalición integrada por siete candidatos, las vanidades han impedido que cuaje una verdadera alianza. Todo empezó mal desde que no se armó una lista única de candidatos al Congreso. Y se agravó esta semana durante el debate promovido por El Tiempo y Semana cuando Íngrid Betancourt y Alejandro Gaviria se dijeron de todo. Con razón el periodista Félix de Bedout escribió un trino en el que rebautizó la “Coalición de la Esperanza” como la “colisión de la esperanza”. Mientras el centro se despelleja, esta semana Fajardo y De la Calle se tomaron el tinto que se debían hace cuatro años.
El florero
El florero de Llorente de la pelotera entre Betancourt y Gaviria fue la llegada del senador Germán Varón Cotrino a la campaña. Para ella, Varón es una ficha política que encarna los peores vicios del clientelismo de Cambio Radical. Betancourt amenazó incluso con salirse de la coalición si aquello ocurría. Más allá de las acusaciones cruzadas, lo cierto es que Varón es un hombre de las entrañas de Germán Vargas Lleras. Aunque Gaviria aclaró que no llegaba a su precandidatura como cuota de Cambio Radical, es claro que Vargas Lleras le dio su aprobación para esa movida. Con otro antecedente que juega contra Gaviria. Se trata del abogado Gerardo Torres, conocido como Yayo, quien fue asesor de Varón Cotrino en su Unidad de Trabajo Legislativo. En desarrollo del escándalo del cartel de la toga trascendió que Yayo trabajó con el exfiscal Luis Gustavo Moreno, condenado por corrupción.
Acuerdo herido
La Corte Constitucional declaró el estado de cosas inconstitucional en materia de seguridad y protección para los excombatientes de las Farc. Determinó que el Gobierno no ha hecho esfuerzos suficientes para evitar el crimen de más de 300 reincorporados desde la firma del Acuerdo, en noviembre de 2016. La cruda radiografía de la Corte está en una ponencia de 253 páginas, que en agosto pasado reveló El Espectador. Tras la publicación, y por los alcances del documento, el gobierno Duque se movió para tratar de tumbar la ponencia o retrasar la sentencia. En ese momento estaba por llegar a Colombia António Guterres, secretario general de Naciones Unidas. Desde Palacio llamaron a varios magistrados y se pidió audiencia pública. Al final, la Corte, en una votación apretada de 5 a 4, señaló que hay un estado de cosas contra la Constitución y ordenó medidas estructurales que buscan enderezar la implementación del Acuerdo. Uno de los más grandes jalones de orejas al gobierno Duque.
¿Impedido?
Si la Corte Constitucional le aceptó el impedimento al magistrado Alejandro Linares por un comentario sin mayor alcance sobre el aborto, es muy probable que ocurra lo mismo con el designado conjuez para dirimir este caso, Juan Carlos Henao. El exrector del Externado fue recusado porque en declaraciones a los medios había señalado lo siguiente: “Yo estoy a favor del aborto, no creo en imposiciones de la religión, no creo que el Estado tenga que ser confesional”. Así, el fallo sobre la despenalización del aborto se embolataría mucho más.
Aviso en el Hay
Los asistentes a la charla del pasado viernes en el Centro de Convenciones en Cartagena, entre el escritor Ricardo Silva y la periodista Yolanda Ruiz, en el marco del Hay Festival, se extrañaron por el mensaje que apareció en la pantalla grande antes de empezar: “Este evento hace parte de los programas y proyectos del Gobierno Nacional y se encuentra financiado con recursos públicos. Los asistentes deben abstenerse de cualquier acto proselitista o incompatible en cualquier sentido con las disposiciones aplicables a este tipo de eventos”. Para unos, en tiempos electorales, estuvo ha lugar el aviso. Para otros, sonó a mordaza.
La visita
Hoy se cumplen 140 años del natalicio del presidente estadounidense Franklin Delano Roosevelt (1882-1945). Vino a Cartagena acompañado de sus hijos Franklyn y John, en julio de 1934, en el buque Houston. La ciudad estaba llena de carteles invitando al evento y anunciando dos días festivos. Lo recibió con cañonazos de salva el presidente colombiano Enrique Olaya Herrera. Hubo desfile militar en el Camellón de los Mártires y tomaron té en el Club La Popa. Los cartageneros aplaudieron el paso del automóvil Lincoln que prestó el empresario Roberto Cavelier para llevar a Roosevelt a la casa de Vicente Mogollón, barrio Manga, donde se hospedó.
Democráticos
En Colombia, una de las principales promesas que trajo la ola de emprendimientos ha sido la de democratizar el acceso a productos y servicios; empresas como Nubank, Rappi y La Haus, por ejemplo, han abierto una nueva era gracias a la tecnología. Pues bien, Comercialise, la firma que más vende y arrienda locales en el país, cambió su modelo de negocio para democratizar su servicio. Ahora, en lugar de ser un comercializador exclusivo, la empresa paisa ofrecerá locales en centros comerciales, calle, edificios empresariales y proyectos de usos mixtos.
Presidente
La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia eligió el pasado jueves como su nuevo presidente al veterano jurista Marco Antonio Rueda. Se trata de uno de los magistrados con mayor recorrido judicial del alto tribunal y, además, uno de los más respetados. Este año la Sala de Instrucción deberá resolver casos claves, entre ellos si acusa o no al excongresista Álvaro Hernán Prada, investigado por el caso del expresidente y exsenador Álvaro Uribe. Aunque Prada renunció a su curul alegando falta de garantías, el alto tribunal mantuvo la competencia en este caso. El magistrado Rueda fue uno de los que apoyaron la tesis del magistrado César Reyes, en el sentido de que la Corte debía seguir al frente del proceso y no remitirlo a la Fiscalía, como pretendía Prada.
Nuevo vice
El viernes pasado fue nombrado por el presidente Iván Duque como nuevo viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa el abogado Camilo Andrés Rojas, quien se venía desempeñando como secretario general de la institución. Rojas es un hombre de toda la confianza del ministro Wilson Ruiz, al punto que, incluso, trabajó con él en el Consejo Superior de la Judicatura. Rojas tiene 40 años y su primer trabajo en el sector público fue como auxiliar de servicios generales en una entidad de seguridad. Estudió en la noche en la Universidad Católica y, una vez como abogado, logró escalar en la vida pública. A pesar de su juventud, antes de llegar al Ministerio de Justicia, Rojas oficiaba como conjuez del Tribunal de Cundinamarca y del Consejo Nacional Electoral. Uno de sus propósitos será reglamentar la exportación de la flor seca del cannabis medicinal.
MICROLINGOTES
Por ÓSCAR ALARCÓN NÚÑEZ
Egan, coge pista. Te esperamos en la meta.
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Zuluaga contagió a los candidatos con el Covid: quedaron sin olfato.
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Esa coalición ni es de centro ni tiene Esperanza.
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La presidenta de la Cámara no es copieta, sino plagi-Aria.
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Con ese lenguaje, no cabe duda, Rodolfo Hernández es un Vulgomaestre.
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¿Será que Gabo nos dio Cato por liebre?
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