El Gobierno Nacional envió un equivocado mensaje al país decretando un duelo nacional con ocasión de la muerte del Ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo. Nadie pone en duda que toda vida es sagrada y que es jurídicamente válido rendir homenaje a quienes en vida hicieron parte del gobierno Nacional. Y si bien se dice que el duelo nacional se decretó en honor a los casi 52.000 fallecidos por la pandemia, es un error que con la coincidencia de fechas se sugiera que hay unos muertos más importantes que otros.
(Lea: “Papá, gózate la vida eterna”: el último adiós a Carlos Holmes Trujillo)
Desde la llegada al país de la Covid-19, en marzo de 2020, las vidas de los colombianos cambiaron por completo y muchas de ellas se apagaron en una lucha que ha destrozado muchas familias. Desde que se conoció el primer fallecimiento por el virus, la nación fue testigo de una situación desesperanzadora. Se vio cómo muchas madres fallecieron dejando a sus hijos solos, cómo muchos abuelos se despedían de sus familias por videollamada e incluso cómo era difícil afrontar el dolor por no poder participar en el funeral.
Muchas familias están destrozadas y la gran mayoría de los colombianos han vivido de cerca esta enfermedad. No obstante, hasta la fecha, el gobierno Nacional ha mantenido un mensaje esperanzador desde sus programas diarios. A pesar de los miles de muertos, se ha insistido en reactivar la economía, ver el futuro con optimismo y fortalecer el auto cuidado porque es posible salir de esta situación. Sin embargo, en ningún caso, pese a la delicada situación, se había decretado una medida semejante.
Por lo mismo, el hecho lamentable que significó la muerte del Ministro de Defensa y el duelo nacional decretado el mismo día, hace que se interprete el mensaje de forma reprochable. Parecería que todas las demás víctimas del coronavirus no revisten la importancia suficiente. De ahí que, si la iniciativa era rendir un homenaje a todas las víctimas, el momento debió ser otro. En últimas, deberíamos estar en duelo nacional desde mucho tiempo atrás.
(Lea también: Con baja saturación, pero estable, se encuentra representante César Pachón)
Mientras tanto, la ansiedad de todos los colombianos sigue creciendo por la falta de la vacuna contra el coronavirus y no se sabe qué terminará de pasar ante esta difícil situación. Se empieza a escuchar que si fallecen los miembros del gabinete no se sabe qué le puede esperar a todas las personas de a pie, dado que la ocupación de las camas en las Unidades de Cuidado Intensivo (UCI) no baja y no hay claridad suficiente sobre el proceso de vacunación. Luego de conocer la lamentable noticia del fallecimiento del Ministro de Defensa, muchos colombianos quedaron más temerosos que antes, lo cual no solo impacta en el bienestar social sino en la misma economía.
De ahí que el duelo nacional y su equivocado mensaje debe servir para que el gobierno aumente sus esfuerzos por iniciar la vacunación cuanto antes. De lo contrario, habrá que decretarse un duelo nacional permanente que difícilmente se logrará superar a corto plazo. La situación es cada día más grave, por lo cual se debe evitar tomar medidas que acrecientan la incertidumbre y la ansiedad. Es hora de asegurar el inicio de lo que todos merecemos y esperamos: la vacunación.