Así será el ministerio del Deporte

Una de las promesas más reiteradas del presidente Santos en los últimos meses ha sido la creación de un ministerio del Deporte, y ahora que le quedan tres meses de Gobierno, el mandatario cumplió con llevar ante el Congreso una iniciativa que materializaría su anhelo.  La iniciativa, que requerirá cuatro debates para convertirse en ley de la república, transforma a Coldeportes en una entidad de rango ministerial, “como organismo principal de la administración pública, del nivel central, rector del sector y del Sistema Nacional del Deporte”.

Una vez el Congreso  le dé el beneplácito a la iniciativa, el ministerio del Deporte tendrá entre sus funciones “formular, adoptar, dirigir, coordinar y ejecutar la política pública, planes, programas y proyectos en materia el deporte, la recreación, el aprovechamiento del tiempo libre y la actividad física, para promover el bienestar, la calidad de vida, así como contribuir a la salud pública, a la educación, a la cultura, a la cohesión social, a la conciencia nacional y a las relaciones internacionales, a través de la participación de los actores públicos y privados”.

Además, tendrá 35 funciones claramente definidas para poder desarrollar el objetivo de servir como un Ministerio que formule, promueva y financie todas las actividades y programas dentro del ámbito deportivo. Y entre estas funciones está la de “dirigir, organizar, coordinar y evaluar el Sistema Nacional del Deporte para el cumplimiento de sus objetivos, y orientar el deporte colombiano, el Comité Olímpico Colombiano, el Comité Paralímpico Colombiano, las Federaciones Deportivas, los Institutos Departamentales y Municipales, entre otros, en el marco de sus competencias”.

En el papel, el Ministerio funcionará con tres oficinas (la de control interno, la asesora de planeación y la jurídica) y con un viceministerio, que, a la vez, tendrá a cargo cuatro direcciones (Posicionamiento y Liderazgo Deportivo; de Fomento y Desarrollo; Recursos y Herramientas del Sistema Nacional del Deporte; y de Inspección, Vigilancia y Control).

El Ministerio también absorberá los bienes y responsabilidades que hoy tiene Coldeportes, e inclusive los funcionarios de esta entidad pasarán directamente a la cartera naciente. También será el destinatario de los contratos y convenios que tenga la entidad y de sus archivos. El proyecto también le asigna la responsabilidad al ministerio de Hacienda de hacer los ajustes presupuestales para dotar al Ministerio de suficientes recursos para su funcionamiento.

Y finalmente el proyecto le otorga un año de transición, a partir de la expedición de la ley, para que se adecuen los procedimientos y operaciones que le den vida jurídica y estructura administrativa a la nueva cartera del deporte. Con la radicación de dicha iniciativa, Santos cumple con una promesa que hizo desde finales de 2017.

Una de las promesas más reiteradas del presidente Santos en los últimos meses ha sido la creación de un ministerio del Deporte, y ahora que le quedan tres meses de Gobierno, el mandatario cumplió con llevar ante el Congreso una iniciativa que materializaría su anhelo.  La iniciativa, que requerirá cuatro debates para convertirse en ley de la república, transforma a Coldeportes en una entidad de rango ministerial, “como organismo principal de la administración pública, del nivel central, rector del sector y del Sistema Nacional del Deporte”.

Una vez el Congreso  le dé el beneplácito a la iniciativa, el ministerio del Deporte tendrá entre sus funciones “formular, adoptar, dirigir, coordinar y ejecutar la política pública, planes, programas y proyectos en materia el deporte, la recreación, el aprovechamiento del tiempo libre y la actividad física, para promover el bienestar, la calidad de vida, así como contribuir a la salud pública, a la educación, a la cultura, a la cohesión social, a la conciencia nacional y a las relaciones internacionales, a través de la participación de los actores públicos y privados”.

Además, tendrá 35 funciones claramente definidas para poder desarrollar el objetivo de servir como un Ministerio que formule, promueva y financie todas las actividades y programas dentro del ámbito deportivo. Y entre estas funciones está la de “dirigir, organizar, coordinar y evaluar el Sistema Nacional del Deporte para el cumplimiento de sus objetivos, y orientar el deporte colombiano, el Comité Olímpico Colombiano, el Comité Paralímpico Colombiano, las Federaciones Deportivas, los Institutos Departamentales y Municipales, entre otros, en el marco de sus competencias”.

En el papel, el Ministerio funcionará con tres oficinas (la de control interno, la asesora de planeación y la jurídica) y con un viceministerio, que, a la vez, tendrá a cargo cuatro direcciones (Posicionamiento y Liderazgo Deportivo; de Fomento y Desarrollo; Recursos y Herramientas del Sistema Nacional del Deporte; y de Inspección, Vigilancia y Control).

El Ministerio también absorberá los bienes y responsabilidades que hoy tiene Coldeportes, e inclusive los funcionarios de esta entidad pasarán directamente a la cartera naciente. También será el destinatario de los contratos y convenios que tenga la entidad y de sus archivos. El proyecto también le asigna la responsabilidad al ministerio de Hacienda de hacer los ajustes presupuestales para dotar al Ministerio de suficientes recursos para su funcionamiento.

Y finalmente el proyecto le otorga un año de transición, a partir de la expedición de la ley, para que se adecuen los procedimientos y operaciones que le den vida jurídica y estructura administrativa a la nueva cartera del deporte. Con la radicación de dicha iniciativa, Santos cumple con una promesa que hizo desde finales de 2017.