El segundo vicepresidente de Colombia en tiempos de Ernesto Samper Carlos Lemos Simmonds contribuyó a la gesta de la Constitución de 1991 desde una causa que no le era ajena: los asuntos económicos, sociales y ecológicos.
El payanés, que falleció en 2003 a causa de un cáncer cuando sumaba 69 años, fue un líder político del Cauca y si bien se graduó como abogado, se desempeñó con solvencia como periodista, sirviendo como columnista, subdirector y hasta director de programas televisivos.
Aunque fue un escéptico del proceso constituyente, e incluso fue el único miembro del Partido Liberal que se opuso a revocar el Congreso, terminó adhiriendo a la carta magna. Eso sí, sin dejar de formular sus reparos: “Las personas que, como yo, creen que esto no se debió haber hecho, debemos ‘frentiar’ la situación creada, para tratar de conservar unos valores por los cuales ha luchado mucha gente durante muchos años y que ahora veo amenazados”, decía en entrevista con Revista Semana en los 90.
Lemos Simmonds, quien fue senador, representante y concejal, fue un fiel escudero del expresidente Julio César Turbay, a quien sirvió como secretario General de Presidencia y ministro de Relaciones Exteriores. De hecho, es célebre su contribución como miembro de la Comisión de Asuntos Externos a la disputa que hubo con Nicaragua por aguas del mar Caribe. Sin embargo, también tuvo una faceta de paz y ayudó al proceso que llevó a que el M-19 dejara las armas.
No obstante, hay quienes desde la izquierda no dejan de cobrarle que, días antes de la muerte de Bernardo Jaramillo Ossa, dijo que el brazo político de las Farc era la Unión Patriótica. El entonces candidato presidencial reprochó aquellas declaraciones y resaltó que de esta manera el entonces ministro los estaba condenando a la muerte.
Como uno de los 25 delegatorios del Partido Liberal en la Asamblea Constituyente, Lemos integró la Comisión Quinta, encargada, entre otros, también de temas de hacienda pública, control fiscal, servicios y aspectos ecológicos. Precisamente, como reseña Armando Montenegro en un documento de la Universidad de los Andes, Colombia le debe al payanés la creación de la Superintendencia de Servicios Públicos, “para proteger a los consumidores y vigilar y supervisar a las empresas”.
Adicionalmente, el dirigente, en compañía de otros constituyentes, fue quien propuso que privados pudieran participar de la prestación de servicios públicos. En una columna publicada en este diario en 2011, Felipe Zuleta Lleras recordaba esa bandera de Lemos y lo citaba cuando advertía que muchos se han hecho ricos, “riquísimos” con los servicios públicos.
“Las tarifas de los servicios se han transformado en una modalidad inclemente de la confiscación. Cada vez son más altas, porque el pillaje es cada vez mayor. En realidad, en Colombia hace rato se privatizaron los servicios públicos: con su producido se han hecho ricos, riquísimo, más de un particular. Las empresas públicas, son fincas, haciendas, feudos personales de unos cuantos políticos que convirtieron en patente de corso su credencial”, decía Lemos citado por Zuleta.
Fue reconocido también por ser uno de los constituyentes que votó en contra la eliminación de la extradición e incluso, en un perfil de 1996 publicado por El Tiempo, se recordaba que en el gobierno de Belisario Betancur “fue opositor sistemático, por su falta de firmeza con la guerrilla”, al punto que ayudó a hundir una reforma constitucional del presidente que buscaba que se prohibiera la extradición de colombianos.
Su desempeño en la Constituyente, sumado al trabajo diplomático y legislativo que emprendió años atrás, le sirvieron como plataforma para competir por la candidatura presidencial del Partido Liberal con miras a las elecciones de 1994. Sin embargo, el ganador fue el expresidente Ernesto Samper.
Aunque inicialmente se perfiló como opositor, Lemos terminó de escudero de Samper y le aceptó asumir la Vicepresidencia, cuando Humberto de la Calle presentó su renuncia. Incluso, alcanzó a ser presidente algunos días en enero de 1998 ante una ausencia temporal de Samper por unos exámenes médicos.