Chantaje a ganaderos

En su doble calidad de ex funcionario público (como vicecontralor general y ex superintendente de Notariado y Registro) y dirigente de los ganaderos, José Félix Lafaurie respeta y cree en la institucionalidad y duda que la actual Corte Suprema se encuentre politizada. Sin embargo, advierte que se deben profundizar las investigaciones por farcpolítica y califica como una “percepción social distorsionada” la estigmatización que se ha hecho de su gremio por supuestos nexos con el paramilitarismo. Al mismo tiempo denuncia un tráfico de versiones y verdaderas mafias de desmovilizados que extorsionan a los ganaderos amenazándolos con relacionarlos con las autodefensas si no pagan millonarias ‘vacunas’.              

¿Cómo llega usted a la dirigencia de un gremio tan importante, pero también tan cuestionado como el ganadero?

Vengo de una familia ligada al trabajo del campo. Y tengo también la vena del servicio público, tanto en el Estado como en la dirigencia gremial. Mi padre fue parlamentario, y escarbando en los recuerdos me encontré con que también había hecho parte de los fundadores de la Federación en 1964.

 En estos días, precisamente, el gremio ganadero vuelve a escena con la vinculación de Jorge Visbal a una indagación preliminar por parapolítica...

Si el tema fuera de apoyo paramilitar a su campaña, que es de lo que se trata la parapolítica, hay que recordar que a Jorge Visbal no le alcanzaron los votos y llegó al Senado en reemplazo del desaparecido Luis Guillermo Vélez. Vaya uno a saber quién, cómo y, sobre todo, con qué motivo uno de estos escuchados en versión de la Ley de Justicia y Paz decidió mencionarlo. Jorge en el marco de la ley y de su condición de dirigente gremial habló con unos y otros y asumió la defensa de los ganaderos y la condena de los violentos con un coraje indecible, que inclusive le costó varios atentados y el exilio de su familia.

¿Qué concepto tiene de la Ley de Justicia y Paz?

No puede ser mejor. La apoyamos con decisión en su momento. Creemos que sus resultados la defienden, pero no se pueden desconocer sus defectos. Habíamos advertido de la cacería de brujas que se podría desencadenar a partir de las versiones, sin control ni confirmación, de unos personajes que terminaron metidos en un torbellino de ambición, de narcotráfico y de violencia indiscriminada.

¿Hasta dónde y hasta cuándo creerles a los ex paramilitares?

Estamos ante una verdadera feria de versiones interminables en las que un día estos señores deciden recordar y al siguiente se retractan. En varias ciudades de la Costa se habla de desmovilizados que van de finca en finca chantajeando a los ganaderos, exigiéndoles dinero a cambio de no ser mencionados ante la justicia.

¿Por qué se ha estigmatizado al gremio ganadero como paramilitar?

Como presidente de Fedegán he aceptado públicamente la responsabilidad colectiva que nos pueda caber, porque el gremio pueda haber visto con buenos ojos la creación de los primeros movimientos de autodefensa, para eso exclusivamente, para defendernos, porque estábamos siendo atacados en forma aleve y sistemática y el Estado no tenía ni la capacidad ni la voluntad para defendernos. Por ese paramilitarismo fuimos extorsionados, y si ello nos convierte en auspiciadores, entonces que investiguen a todos los ganaderos como auspiciadores de las guerrillas, porque durante muchos años miles de ellos y de productores rurales se vieron forzados a entregarles el fruto de su trabajo.

¿Cómo explica que el aparato judicial del Estado esté volcado hacia tres temas: las chuzadas, la parapolítica y los falsos positivos?

Yo diría que son cuatro, porque la Ley de Justicia y Paz también tiene absorbida a nuestra justicia. Pero reitero, por principio, que creo en nuestras instituciones y también creo que es la polarización del país la que está politizando estos temas. ¿Pero por qué no hay el mismo interés ni los mismos avances en la farcpolítica?

¿Y por qué cree que ocurre eso?

Hay una pequeña gran diferencia: los paramilitares se han desmovilizado y las guerrillas no. Pero tenemos la realidad de bulto, y no se percibe mayor interés en iniciar las investigaciones de oficio a quienes no habrían podido hacer proselitismo político en zonas guerrilleras sin contar con su aprobación expresa o, cuando menos, sin su desaprobación.

¿La Corte Suprema está politizada?

Fíjese que hay niveles de presunta politización. Hay quienes afirman que la Corte está politizada porque sólo investiga parapolíticos uribistas. Pero no creo que haya una intencionalidad de la Corte en tal sentido. Sin embargo, debería crearse un grupo especializado para investigar los tentáculos económicos y políticos de la guerrilla en sus zonas de influencia.

¿Cómo  maneja el gremio el tema de las víctimas de los ganaderos?

Las víctimas ganaderas no son menos víctimas, y también tienen derecho a la verdad, la justicia y la reparación. La Fundación Fundagán está culminando un documento-denuncia, en el que consignamos los nombres de más de 3.000 víctimas, entre asesinadas y secuestradas, y de más de 400 testimonios de las víctimas o de sus familiares. Esta historia de violencia  no dudo en calificarla de genocidio.

Los ganaderos y la reelección

José Félix Lafaurie asegura que es partidario de la reelección presidencial al igual que el gremio que representa, aunque advierte que más que de una persona en particular, el tema tiene que ver con una posición y un compromiso: “Como víctimas de la violencia nuestra prioridad es la seguridad y las señales del mundo le están devolviendo el espacio que tuvo la producción agropecuaria antes de las revoluciones industriales”, dice. Sin embargo, afirma que si el presidente Álvaro Uribe es quien mejor encarna esos dos compromisos, los ganaderos lo apoyan.