Comisión Primera de Senado insiste en sesiones semipresenciales
Gran parte de los miembros de dicha comisión abogan por volver al Capitolio. En contraste, la senadora Paloma Valencia dice que el Legislativo debe ser ejemplo para el resto de la ciudadanía y trabajar desde casa.
Redacción Política - politicaelespectador@gmail.com
Un mes después de que se iniciara las sesiones de manera virtual (o remota, como algunos congresistas han preferido llamarlas), la Comisión Primera del Senado volvió a tocar el tema este martes y varios senadores insistieron en la necesidad de sesionar de manera presencial o al menos semipresencial para garantizar el control político del Congreso a los decretos que ha expedido el Gobierno Nacional en mitad de la declaración de la emergencia social y económica.
(Lea: Gobierno a congresistas: “Nadie ha dicho que su movilidad está restringida”)
El debate ya ha tomado un poco más de forma en la Cámara de Representantes, pero por el lado del Senado, el presidente de la corporación, Lidio García, anunció que la otra semana se podrían retomar las sesiones en el Capitolio. Por el momento, algunos senadores manifestaron que la virtualidad ha afectado a el poder Legislativo políticamente. “El Congreso hoy no está haciendo control político. Si la pandemia genera consecuencias en la salud de los colombianos y en la económica, hagamos un esfuerzo los congresistas para que no produzca consecuencias en el Estado de Derecho”, señaló el senador Temístocles Ortega, de Cambio Radical, para quien las medidas tomadas por el Gobierno para enfrentar la crisis han podido se modificadas y mejoradas en el Legislativo.
Por el mismo partido también habló el senador Rodrigo Lara: “Un Congreso virtual pierde su aptitud para hacer control político (…) Hoy, el Congreso es una rama del poder absolutamente inane, que no está ejerciendo su función de control político y disimula su falta de cumplimiento del mandato constitucional preservando solo las formas”.
Escuche aquí el pódcast Suficiente Ilsutración sobre el futuro de las sesiones semipresenciales del Congreso
Según la senadora Esperanza Andrade, del Partido Conservador, se ha perdido demasiado tiempo en esa discusión. “Hemos perdido mes y medio”, comentó, y advirtió sobre la importancia que tiene el Congreso para hacer el control de los decretos expedidos. “Creo que es necesario tomas decisiones excepcionales en medio de la crisis, pero también es importante el control político que le corresponde al Congreso”.
Por su parte, el senador Roy Barreras, del Partido de la U, aseguró que “no hay ninguna manera de ejercer el equilibrio de poderes desde esta virtualidad”, que, a su juicio”, “no tiene justificación epidemiológica alguna”. “Han pasado dos meses y en esos decretos hay muchas cosas positivas, pero muchas de ellas violatorias de derechos fundamentales. Son decretos que tienen efectos muy grandes en lo que será la pospandemia. Hoy no existe equilibrio de poderes con la virtualidad del Congreso”, comentó.
Otros senadores de la U, como Armando Benedetti o Roosvelt Rodríguez, también se manifestaron a favor de regresar al Capitolio. “Llegó el momento de que vayamos pensando en hacer sesiones presenciales o que se pueda reducir el Congreso, de manera que se delegue a algunas personas”, anotó.
(Para contexto: "Tele-Congreso": se acentúan los reparos a sesionar en la virtualidad)
En ese mismo sentido, el senador Iván Name, de la Alianza Verde, criticó que el Congreso se haya demorado tanto para aparecer en la crisis. “Nos demoramos un mes para aparecer, fuimos los grandes ausentes y esos no va a costar muy caro. Los vacíos institucionales los ocupan institucionalmente otros”, dijo, y advirtió que una consecuencia de eso es el “hiperpresidencialismo”.
El senador Julián Gallo, desde el partido FARC, también señaló que esa bancada prefiere un modelo que funcione de manera presencial o semipresencial. Según él, la experiencia del Congreso de manera virtual es que se limita la labor de control político. Como se puede ver en las declaraciones, quienes buscan volver al recinto del Capitolio apuntan, justamente, a esa misma razón.
(Le puede interesar: El debate por las "chuzadas": ¿inteligencia politizada?)
Por otra parte, un sector minoritario, en el que se encuentra la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático, se ha manifestado en contra de dichas sesiones presenciales, aduciendo que el Congreso debe ser un ejemplo del trabajo en casa para evitar la propagación del nuevo coronavirus. “Tenemos derecho a movilizarnos, pero el problema son las condiciones de la enfermedad (…) Soy de la tesis que una sesión semipresencial rompe el equilibrio entre senadores porque unos terminan actuando en nombre de todo el partido, es un Congreso muy corporativo y disminuye las condiciones de igualdad”, dijo Valencia. También señaló que no entiende por qué el Congreso no da ejemplo en una situación de emergencia en donde el llamado mundial es a trabajar desde casa.
Un mes después de que se iniciara las sesiones de manera virtual (o remota, como algunos congresistas han preferido llamarlas), la Comisión Primera del Senado volvió a tocar el tema este martes y varios senadores insistieron en la necesidad de sesionar de manera presencial o al menos semipresencial para garantizar el control político del Congreso a los decretos que ha expedido el Gobierno Nacional en mitad de la declaración de la emergencia social y económica.
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El debate ya ha tomado un poco más de forma en la Cámara de Representantes, pero por el lado del Senado, el presidente de la corporación, Lidio García, anunció que la otra semana se podrían retomar las sesiones en el Capitolio. Por el momento, algunos senadores manifestaron que la virtualidad ha afectado a el poder Legislativo políticamente. “El Congreso hoy no está haciendo control político. Si la pandemia genera consecuencias en la salud de los colombianos y en la económica, hagamos un esfuerzo los congresistas para que no produzca consecuencias en el Estado de Derecho”, señaló el senador Temístocles Ortega, de Cambio Radical, para quien las medidas tomadas por el Gobierno para enfrentar la crisis han podido se modificadas y mejoradas en el Legislativo.
Por el mismo partido también habló el senador Rodrigo Lara: “Un Congreso virtual pierde su aptitud para hacer control político (…) Hoy, el Congreso es una rama del poder absolutamente inane, que no está ejerciendo su función de control político y disimula su falta de cumplimiento del mandato constitucional preservando solo las formas”.
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Según la senadora Esperanza Andrade, del Partido Conservador, se ha perdido demasiado tiempo en esa discusión. “Hemos perdido mes y medio”, comentó, y advirtió sobre la importancia que tiene el Congreso para hacer el control de los decretos expedidos. “Creo que es necesario tomas decisiones excepcionales en medio de la crisis, pero también es importante el control político que le corresponde al Congreso”.
Por su parte, el senador Roy Barreras, del Partido de la U, aseguró que “no hay ninguna manera de ejercer el equilibrio de poderes desde esta virtualidad”, que, a su juicio”, “no tiene justificación epidemiológica alguna”. “Han pasado dos meses y en esos decretos hay muchas cosas positivas, pero muchas de ellas violatorias de derechos fundamentales. Son decretos que tienen efectos muy grandes en lo que será la pospandemia. Hoy no existe equilibrio de poderes con la virtualidad del Congreso”, comentó.
Otros senadores de la U, como Armando Benedetti o Roosvelt Rodríguez, también se manifestaron a favor de regresar al Capitolio. “Llegó el momento de que vayamos pensando en hacer sesiones presenciales o que se pueda reducir el Congreso, de manera que se delegue a algunas personas”, anotó.
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En ese mismo sentido, el senador Iván Name, de la Alianza Verde, criticó que el Congreso se haya demorado tanto para aparecer en la crisis. “Nos demoramos un mes para aparecer, fuimos los grandes ausentes y esos no va a costar muy caro. Los vacíos institucionales los ocupan institucionalmente otros”, dijo, y advirtió que una consecuencia de eso es el “hiperpresidencialismo”.
El senador Julián Gallo, desde el partido FARC, también señaló que esa bancada prefiere un modelo que funcione de manera presencial o semipresencial. Según él, la experiencia del Congreso de manera virtual es que se limita la labor de control político. Como se puede ver en las declaraciones, quienes buscan volver al recinto del Capitolio apuntan, justamente, a esa misma razón.
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Por otra parte, un sector minoritario, en el que se encuentra la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático, se ha manifestado en contra de dichas sesiones presenciales, aduciendo que el Congreso debe ser un ejemplo del trabajo en casa para evitar la propagación del nuevo coronavirus. “Tenemos derecho a movilizarnos, pero el problema son las condiciones de la enfermedad (…) Soy de la tesis que una sesión semipresencial rompe el equilibrio entre senadores porque unos terminan actuando en nombre de todo el partido, es un Congreso muy corporativo y disminuye las condiciones de igualdad”, dijo Valencia. También señaló que no entiende por qué el Congreso no da ejemplo en una situación de emergencia en donde el llamado mundial es a trabajar desde casa.