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Un inusitado debate de control político adelantó en las últimas horas el Congreso de la República sobre la crisis de seguridad en Sucre.
Buscando prácticamente desmarcarse de la oscura sombra de su hermano Álvaro ‘el Gordo’ García Romero –condenado por parapolítica por la masacre de Macayepo–, la senadora Teresita García promovió el debate sobre la alarmante situación de inseguridad en el departamento.
La congresista alarmó sobre la grave situación que se vive en el departamento de Sucre, entre otras causas, por las bandas criminales.
“Sincelejo se convirtió en la segunda ciudad con la tasa más alta de hurtos a residencias en el país, con un 2,4% por encima del promedio nacional”, aseguró.
García reclamó a las autoridades locales dar cumplimiento a sus planes de desarrollo en materia de seguridad y denunció que los sincelejanos han perdido la confianza en los organismos de seguridad por el aumento de los crímenes.
“Hoy los ciudadanos viven atemorizados cuando transitan por la calles y cuando abordan el transporte público”, dijo la senadora.
Hizo además un llamado al Gobierno para que analice las problemáticas actuales derivadas de otros conflictos e intervenga de forma inmediata. “El 47.3% de los habitantes de Sincelejo viven en la pobreza y el 10 % en pobreza extrema, por eso pido mayor inversión para este departamento, donde una de las principales fuentes de empleo es el mototaxismo , un oficio que se está convirtiendo en una verdadera bomba de tiempo en materia de movilidad y tampoco cuenta con el control suficiente por parte de las autoridades”, dijo.
La senadora explicó que de las los 90 muertes violentas registradas en Sucre durante el año 2014, 64 fueron por sicariato. Según ella, el mototaxismo es un fenómeno que ha impedido se contrarreste eficazmente esta clase de delitos.
Una de las mayores preocupaciones para la congresista, es la disminución de policías y militares en el departamento. “En el año 2011 contábamos con 1949 uniformados y en 2014 hay 1931. No existe un pie de fuerza suficiente para enfrentar la delincuencia que se ha desbordado en la región. La presencia de la fuerza pública es vital en este momento, pero además es fundamental mejorar la calidad de nuestros cuerpos policiales, y lograr su especialidad”, advirtió.
Por Redacción Política
