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El Partido Conservador no aguantó el enfrentamiento entre el presidente-candidato, Juan Manuel Santos, y el candidato del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, de cara a la segunda vuelta de la elección presidencial. En ese tire y afloje, la ahora excandidata Marta Lucía Ramírez y un grupo de parlamentarios se decidieron por apoyar a Zuluaga y un sector mayoritario de los congresistas apostarán por la reelección.
Aunque se presentaron reuniones entre los dos sectores para tratar de mantener unido el partido, las diferencias se volvieron irreconciliables y luego de varias gestiones en las que fueron claves los senadores Roberto Gerlein, Hernán Andrade, Efraín Cepeda y Luis Emiro Sierra, se consolidó una mayoría a favor de Santos.
El argumento para ese respaldo tiene que ver con la que se ha convertido en la principal bandera de la campaña reeleccionista: la paz. “No se puede desconocer una realidad y es que el Gobierno nunca ha estado tan cerca de sellar un acuerdo y nosotros los conservadores no podemos ser ajenos. La historia nos calificaría de enemigos de la solución pacífica”, manifestó, por ejemplo, Andrade. Para Cepeda, “el presidente es un candidato capaz de lograr la paz y además con él se han reducido la desigualdad social y la pobreza”.
Según se conoció, tras el encuentro ayer entre el jefe de Estado y la bancada conservadora en el Legislativo, Santos les recordó que para la elección del procurador Alejandro Ordóñez él no puso un rival que lo pudiera derrotar y le respetó al partido su candidato. Además, les dijo que la economía va bien, porque los dos ministros de Hacienda que han estado en su mandato son de la colectividad y que una de sus grandes apuestas es el campo, donde también hay una ficha azul.
Sin embargo, aunque la balanza de los parlamentarios se inclinó hacia Santos, las cuentas no son tan favorables como se viene planteando. Los 40 parlamentarios que respaldan al mandatario se suman entre los que están en ejercicio y los que resultaron electos. Por lo menos 10 se quemaron en los comicios del 9 de marzo y otros hasta ahora llegan al Congreso.
Claro, que tratándose de política, cada quien maneja sus propias cuentas. Desde el lado de los que apoyan a Marta Lucía Ramírez y que ayer también anunciaron su apoyo a la candidatura presidencial de Óscar Iván Zuluaga, hacen sumas diferentes. Afirman que de los casi dos millones de votos que tuvo el partido en las elecciones al Congreso, 700 mil son de ellos y a estos hay que sumarles los 160 mil que se dieron solo por la lista.
Además, argumentan que sin maquinaria Ramírez obtuvo cerca de dos millones de apoyos en las urnas. A juicio del senador Eduardo Enríquez Maya, “es muy complicado que mis colegas, los que se quemaron, puedan sacar gente a votar. En política es una realidad que el que está vigente es el que está elegido y no entiendo como el senador Carlos Barriga, que no le alcanzó la votación, pretende dirigir el conservatismo a votar por Santos”.
Lo cierto es que más allá de las cuentas que hagan desde el sector santista o el zuluaguista, es claro que el Partido Conservador no soportó la presión y la división ahora es irreconciliable. Como señala el representante David Barguil, quien hasta el momento es el más opcionado para reemplazar a Ómar Yepes en la dirección de la colectividad: “Es muy complejo llegar a un nuevo gobierno con una bancada dividida. Quien gane nos reclamará por no tener un respaldo total y las relaciones en el partido y con el Gobierno no serán fáciles”.
Pastrana no jugará en elecciones
“Considero que le sirvo mejor a la paz, a mi país y a mi partido al darles paso a las nuevas generaciones (...) La presencia de un expresidente en esta recta final sirve mejor a la patria desde las graderías”. Esas fueron las palabras del exmandatario Andrés Pastrana en un pronunciamiento público desde Buenos Aires, Argentina. También, aprovechó para criticar al presidente Juan Manuel Santos por el manejo que les ha dado a las negociaciones con la guerrilla de las Farc: “La fórmula excluyente y secreta del proceso de La Habana debe replantearse ya mismo, puesto que ha desbordado la paciencia y perdido la credibilidad de los colombianos”, señaló. De paso, Pastrana aprovechó para reconocer el liderazgo que de ahora en adelante ejercerá Marta Lucía Ramírez sobre el Partido Conservador.