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Mientras el gobierno del presidente Iván Duque celebraba lo que considera ha sido el éxito del primer día sin IVA implementado en el país de cara a la reactivación económica, tan golpeada por la pandemia del COVID-19, en el Congreso de la República, los partidos de oposición o llamados alternativos presentaron un balance de las medidas adoptadas para afrontar la crisis, a través de los decretos de Emergencia, Económica y Social expedidos a lo largo de los últimos tres meses.
En el escrito, que suscriben los partidos Polo Democrático, ASI, Mais UP-Colombia Humana y FARC, se señala que las acciones y decisiones tomadas “han sido devastadoras en términos sociales, económicos y sanitarios, y han profundizado aún más la desigualdad”, confirmando que el gobierno Duque “solo gobierna en favor de los grandes poderes económicos que hoy controlan a Colombia”.
“Esta crisis tiene hoy más de 62.000 contagios y 2.000 muertos; en materia social, hay 8.6 millones de desempleado nuevos, grandes franjas de ciudadanos situados en la clase media descendieron a la pobreza y las familias ubicadas en pobreza descendieron a la miseria extrema; mientras, al mismo tiempo, el sector financiero sigue recibiendo los mayores beneficios de esta pandemia a pesar que sus utilidades en la última década fueron de $169 billones”, manifestó el senador Alexander López, del Polo, durante la plenaria virtual de este viernes.
En el corte de cuentas, se habla del cierre tardío del espacio aéreo en el país, a través del decreto 439 del 20 de marzo, a pesar de que el primer caso de coronavirus se presentó el día 6, y que además no se dispuso de ningún cerco epidemiológico, ni controles migratorios que propendieran en garantizar la vida de la población. Asimismo, el documento señala que el decreto 457, que estableció el confinamiento obligatorio, “condenó a los colombianos a padecer hambre porque no dispuso ninguna medida integral para garantizar el mínimo vital y el derecho humano a la alimentación de la población”.
“Según las propias cifras de Fedesarrollo, los auxilios ya existentes antes de la pandemia, como lo son Familias en Acción, Jóvenes en Acción, Adulto Mayor, más el fiasco del subsidio de Ingreso Solidario, solo suman $1.7 billones, de los cuales solo $480.000 millones fueron invertidos adicionalmente en la pandemia, en Ingreso Solidario que no llegó a los grandes sectores de damnificados por graves errores por parte del Departamento Nacional de Planeación. Nos preguntamos entonces, Iván Duque y su Gobierno, ¿dónde están los $117 billones de pesos y el 13% del PIB que dice haber invertido en la pandemia?”, preguntan los partidos de oposición.
Por otra parte, asegura que la pandemia también dejó al descubierto la grave crisis en la que se encuentra el sistema de salud pues, de los 673.000 trabajadores del personal reportados según el DANE, solo el 24% tiene contrato de trabajo, es decir que 511.480 de ellos tiene contrato de prestación de servicios u otra clase de vinculación.
Igualmente, advierten que con el decreto 444, el Gobierno terminó favoreciendo directamente a los bancos, al permitirles la compra de bonos TES con los $9 billones de los colombianos que están en el Banco de la República, el cual los liberó, lo que se tradujo en un regalo al sector financiero de cerca de $360.000 millones al año. Refieren también al decreto 558, con el que, según ellos, se benefició al Grupo Empresarial Antioqueño y el Grupo Aval, al abrir la puerta para el traslado de las obligaciones adquiridas con más de 25.000 pensionados a Colpensiones, “en una transacción que le cuesta al fondo público, más de $5 billones adicionales”.
El documento cuestiona además el decreto 486, con el cual, en su concepto, se deja a su suerte a los campesinos, pues las ayudas para ellos solo corresponden al 3%, mientras que el 90% va para los grandes productores. Con los decretos 770 y 771, se apunta a implementar una reforma laboral al desmontar las primas a los trabajadores, las horas extras, modificando además los contratos de trabajo y la jornada laboral. Y asegura que el decreto 491 viola el principio de separación y equilibrio de poderes, al clausurar el Congreso de la República, evitando un control político real a las medidas de emergencia, al habilitar las sesiones remotas.
“Ante esto, solo podemos propender por un cambio en el modelo económico y de gobierno del país. Es momento de acabar los regalos a los poderosos, debemos imponer de nuevo el impuesto de giro de utilidades al exterior que nos otorgaría $25 billones de recaudo tributario, debemos eliminar los beneficios al sector financiero que solo en la última reforma tributaria suman $7,3 billones, debemos imponer un impuesto a las utilidades de la banca y a los altos patrimonios del Estado, debemos defender la producción nacional del país, fortalecer y desarrollar el agro, revisar los TLC firmados por Colombia, modificar la estructura tributaria y cambiar el sistema de salud”, concluye el escrito.
