El presidente Iván Duque se unió al debate por la extradición del exjefe paramilitar Salvatore Mancuso. A pesar de la petición de que sea enviado a Colombia tras cumplir su pena por narcotráfico en Estados Unidos, esta solicitud se complicó ante el pedido del exparamilitar de ser enviado a Italia, país del que también es ciudadano por cuenta de su padre, y ante algunas supuestas irregularidades en el pedido de extradición por parte de las autoridades colombianas.
Sobre la solicitud de deportación, el primer mandatario señaló que “Salvatore Mancuso tiene graves deudas pendientes con la justicia colombiana”, por lo que se pidió que sea enviado a Colombia apenas termine de pagar su pena en Estados Unidos. Duque advirtió de que, en caso de ser enviado a Italia, el país recurrirá a la jurisdicción universal para que sea procesado por los crímenes de lesa humanidad de los que es acusado.
“Sus crímenes no quedarán en la impunidad”, aseguró el presidente Iván Duque, que aseguró que a Mancuso lo espera una cárcel para que pague por los crímenes que cometió como uno de los máximos jefes de las Autodefensas del Urabá y la Autodefensas Unidas de Colombia. El primer mandatario también calificó como agresión a las víctimas los ofrecimientos de no prisión y extradición en cambio de “una supuesta verdad”.
En esta misma línea, el alto comisionado para la paz, Miguel Ceballos, señaló que, de ser enviado Mancuso a Italia, los casos en su contra serían llevados al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, bajo el mismo principio de la justicia universal invocada por el presidente Duque. Aunque sus crímenes no fueron cometidos en Europa, el principio mencionado anteriormente permitiría que el tribunal continental conociera dicho proceso. Sin embargo, la representante Juanita Goebertus ha señalado que dicho tribunal juzga Estados y no individuos.
La extradición de Mancuso a Colombia está en veremos, e incluso la defensa del exparamilitar se ha movido en Estados Unidos para que sea expulsado y enviado a Italia. El principal argumento de esta medida es que su vida no tendría ningún tipo de garantías en Colombia, debido a los muchos enemigos y personas que buscarían silenciarlo.
El presidente Duque no ha sido el único que ha manifestado su preocupación ante el posible envío a Italia de Mancuso, el defensor Carlos Alfonso Negret, a quien le quedan pocos días en el cargo, señaló que los derechos de las víctimas serían claramente dañados si se tomara esta decisión.
El defensor advirtió que el exjefe paramilitar estaría eludiendo las investigaciones que tiene en su contra por los miles de crímenes y violaciones a los derechos humanos que cometió durante su permanencia en las filas de las Autodefensas. “Constituyen crímenes de lesa humanidad y graves crímenes de guerra y por lo tanto la adjudicación de justicia es una responsabilidad universal que recae en primer lugar en las autoridades colombianas”, expresó el saliente defensor.
Negret señaló que una de las salidas que han estado estudiando es pedir medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que se tomen las medidas necesarias que permitan que Mancuso cumpla con sus condenas en su contra impartidas por la justicia colombiana.
Vale recordar que Mancuso fue extraditado hacia Estados unidos, junto con otros 12 líderes paramilitares en 2008, durante el gobierno de Álvaro Uribe. El líder exparamilitar se había acogido al proceso de justicia y paz, pero, una supuesta permanencia en actividades ilícitas desde prisión hizo que el entonces primer mandatario los enviara a Estados Unidos a responder por cargos de narcotráfico.
