La posición conciliadora frente al Gobierno que ha tenido en los últimos días el senador liberal Héctor Helí Rojas, en temas como el referendo para una segunda reelección y la reforma a la justicia, le ha traído problemas al interior de su colectividad, hasta el punto de que hay quienes se atreven a insinuar, en voz baja eso sí, que el congresista boyacense prepara una nueva “voltereta” política, recordando que en el reciente pasado él hizo parte del uribismo, respaldó la candidatura de Álvaro Uribe contra la de Horacio Serpa en 2002, y sólo en 2004 volvió a las huestes liberales porque, según dijo en ese entonces, medio en serio y medio en broma, “en el uribismo nunca me consintieron”.
Al ser consultado por ese cambio de actitud —antes era vehemente y un duro crítico del Gobierno y ahora se le ve calmado y conciliador— y la posibilidad de esa supuesta “voltereta”, el mismo Héctor Helí Rojas responde en tono irónico: “Ya para qué se voltea uno, si ya el gobierno de Uribe va a terminar. No tendría ningún sentido tratar de volver a una fuerza política de la que me salí por razones políticas y filosóficas acerca del manejo del Estado”. Y acto seguido aprovecha para lanzar sus pullas: “Después del primer Uribe, el de 2002 y 2003, a los que se quedaron a su lado les ha ido mejor porque él se puso a manejar la bancada con prebendas, como el caso del Partido Conservador”.
Sin embargo, reconoce que si es nombrado ponente del referendo reeleccionista, como ya lo anunció el presidente de la Comisión Primera de Senado, Javier Cáceres, podría tener dificultades con su partido porque su posición es de respeto ante las iniciativas populares, es decir, estaría de acuerdo con su aprobación. “El Partido Liberal debería facilitar que el pueblo se exprese sobre temas fundamentales para la democracia. Según mi bancada, Uribe está a punto de fracasar y yo creo que el Presidente no se puede ir a gorrazos, sino que tiene que existir una salida agradable y racional”, agrega.
Son precisamente palabras como esas las que están causando escozor en un sector del liberalismo, aunque la gran mayoría de sus compañeros en el Congreso lo respaldan. Como el senador Juan Manuel Galán, quien aseguró que el Partido está inmerso en varias tendencias y en ningún momento se busca uniformar a sus militantes. “Creo que el propósito del senador Héctor Helí Rojas es de buena fe y lo que quiere es llamar la atención del Partido para que se debata, se discuta y se prepare para lo que viene. Hay que pensar en el futuro de la colectividad”, indicó.
Por su parte, el también senador Camilo Sánchez cree que los pronunciamientos de Rojas han sido sacados de contexto, ya que éste ha demostrado siempre una coherencia absoluta en su postura de oposición al gobierno Uribe. “No creo que a esta hora de la vida Héctor Helí Rojas esté para volteretas. Hoy expediremos un comunicado de unidad frente a los temas álgidos que van a comenzar a discutirse en el Congreso”, enfatizó, aclarando que Rojas en ningún momento está a favor del presidente Uribe sino en contra de una dictadura.
Los problemas de Rojas con su partido, se podría decir que comenzaron hace unas dos semanas, cuando fue invitado por el ministro del Interior y de Justicia, Fabio Valencia Cossio, a una reunión, supuestamente para tratar de limar asperezas en el choque que venían sosteniendo el presidente Uribe y el ex presidente César Gaviria, director del liberalismo. Muchos vieron con suspicacia el que después de dicho encuentro, el congresista haya comenzado a mostrar una posición más conciliadora y hubiese dicho que había que participar en el trámite del proyecto del referendo para una segunda reelección.
Eso, para el senador Luis Fernando Velasco, compañero de Rojas en la Comisión Primera de Senado, es una circunstancia “normal” dentro del trabajo legislativo. Velasco recordó que el senador boyacense siempre ha sido firme con la colectividad y claro a la hora de fijar sus posturas. “Él discute y plantea sus posiciones al interior del Partido, pero a la hora de votar acata lo que hayan decidido las mayorías”.
Y lo mismo piensa Yolanda Pinto, senadora liberal, quien está de acuerdo con que la colectividad discuta los temas sin tapujos y con toda la responsabilidad del caso. “Lo que quiere decir Héctor Helí es que el Partido no puede sustraerse de la discusión de las reformas”. Así las cosas, pareciera que la posición conciliadora no es sólo de Rojas, sino de toda la bancada. Falta ver que piensa el jefe máximo, el ex presidente César Gaviria.
Por Carlos J. Murcia
