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En el último mes, han sido varios los momentos en que miembros del Ejecutivo, incluido el presidente Iván Duque, habrían incurrido en casos de participación en el debate político-electoral por las justas presidenciales. El comandante del Ejército, el general Eduardo Enrique Zapateiro, también habría incurrido en estas prácticas. Ante las implicaciones de estas actuaciones, la Misión de Observación Electoral (MOE) llamó la atención.
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La MOE envió una carta al presidente y al Ministerio Público (Procuraduría y Defensoría) en la que expresaron sus reparos a la participación en política del Ejecutivo y de la cabeza del Ejército. En este mismo sentido expresó las prohibiciones constitucionales en este tema y los efectos que podría acarrear en el ambiente político nacional.
En la misiva, la misión de vigilancia recordó que hay una prohibición expresa de orden constitucional para que los servidores públicos participen en actividades o controversias de tipo político. La MOE recordó fallos de la Corte Constitucional que establece que dichas restricciones tienen como fin “asegurar la imparcialidad, la prevalencia del interés general sobre el particular, la igualdad de las organizaciones políticas, así como la libertad de elección”.
La veeduría electoral recordó tanto al presidente como los entes de control que la ley ha establecido unas sanciones para este tipo de acciones. En este sentido, la MOE recordó que estas reglas le aplican a la mayoría de funcionarios del Estado, pero sobre todo al presidente, debido a que es “jefe del Estado, jefe del Gobierno y suprema autoridad administrativa que le corresponde dirigir la Fuerza Pública y disponer de ella como comandante supremo”.
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Por otro lado, se hizo mención directa a los comentarios del general Zapateiro en contra del candidato Gustavo Petro. La MOE advirtió que las diferentes ramas de la Fuerza Pública no son deliberantes, por lo que impide que sus miembros en activo se pronuncien sobre temas políticos o voten. Se recordó que esta condición es para garantizar su neutralidad.
En este sentido, la MOE recordó que los sucesos ocurridos tras las elecciones del 13 de marzo han sembrado desconfianza en el proceso electoral y la participación en política del presidente y del comandante del Ejército solo agravaría esta situación y romperían la garantía de paz electoral. Por eso, la Misión de Observación Electoral pidió a las autoridades que “se abstengan de manifestar sus preferencias electorales o preocupaciones frente a las posturas y propuestas políticas de los y las candidatas a la Presidencia de la República mientras se resuelve la actual contienda, y se ejerzan oportunamente sus funciones de control, de presentarse incumplimientos”.