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¿Quedaron superadas las diferencias frente al proyecto?
Se escucharon posiciones amplias y hubo voces minoritarias que le tienen miedo a la paz.
¿Miedo o posiciones contrarias a las suyas?
Es que hay un concepto errado sobre el marco, y quienes le tienen miedo a la paz parten del supuesto equivocado de que el proyecto genera impunidad y elegibilidad de los autores de crímenes atroces. Las dos cosas no son ciertas. Impunidad es lo que hay con Justicia y Paz.
¿Cómo se garantiza que no va a haber impunidad?
El marco permite hacer justicia al seleccionar los casos más graves. A la hora de establecer los criterios de selección, la ley tendrá en cuenta la gravedad y la representatividad de los casos. Esto no es un indulto ni una amnistía, es un marco legal para poder conseguir la paz. Es ante todo garantía de conocimiento de la verdad y sanción frente a todos los delitos de lesa humanidad.
¿Y la elegibilidad de los autores de crímenes atroces?
Eso es todavía más falso, empezando porque no se ha tocado el artículo 122 de la Constitución Política (impide la inscripción como candidatos a cargos de elección popular, ni elegir ni designar como servidores públicos a quienes hayan sido condenados, en cualquier tiempo, por delitos relacionados con la pertenencia, promoción o financiación de grupos armados ilegales, delitos de lesa humanidad o por narcotráfico, en Colombia o en el exterior).
¿Está el conflicto en su etapa final, como dice Santos?
Ese es un mensaje claro de que nadie duda en aplicar la fuerza legítima del Estado contra los violentos. Eso es lo que espera el pueblo, confrontación militar, derrota de los violentos, persecución a los terroristas. Pero el primer efecto de este marco legar es garantizar que haya justicia y paz.