A finales de 2020, hubo gran controversia ante la posibilidad de que el exfiscal Néstor Humberto Martínez fuera nombrado como embajador en España. La posible designación fue rechazada, dado que el también exministro era señalado por supuestamente usar la Fiscalía para sabotear el proceso de paz con las extintas Farc.
Al final, el presidente Iván Duque negó que Martínez Neira fuera un candidato para dicha delegación, y señaló que lo más probable es que este fuera nombrado para una comisión en contra del crimen. Tres meses después de estos sucesos, desde presidencia se confirmó el nombre del nuevo embajador de Colombia en España. En vez del exfiscal, el nuevo representante de Colombia ante el reino español será Luis Guillermo Plata, que hasta hace poco fue el gerente para atención del coronavirus.
Este 10 de febrero, el primer mandatario firmó el decreto que designa a Plata “en el cargo de embajador extraordinario y plenipotenciario” de Colombia ante el gobierno del Reino de España. Antes de este, la representación colombiana en España y Andorra estaba comandada por Carolina Barco Isakson, hija del expresidente Virgilio Barco y reconocida por su amplia trayectoria diplomática.
Plata, como otros embajadores nombrados por el gobierno Duque, no ha desempeñado una carrea diplomática. Su hoja de vida se ha centrado sobre todo en el campo de los negocios internacionales. En este sector ha sido consultor de McKinsey & Company, presidente de Proexport Colombia (actual Procolombia), ministro de Industria y Comercio, gerente de The Cornerstone Group y presidente de Probogotá.
Ahora último fungió como el Gerente para el manejo integral de la pandemia COVID-19. Aunque fue designado por el presidente Iván Duque, Plata no figuraba como un funcionario pues su salario dependía del programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo. Esto sirvió para que el ahora embajador no asistiera a las citaciones de control político que le hizo el Congreso. En este cargo estuvo desde el 7 de marzo hasta el 6 de octubre de 2020.
Desde este cargo fue uno de los responsables de la adquisición de ventiladores y otros implementos necesarios para la pandemia. Asimismo, Luis Guillermo Plata fue uno de los encargados de centralizar la compra de los implementos de bioseguridad para garantizar su disponibilidad y uso racional.