Falleció Álvaro Araújo Noguera, dirigente político del Cesar 

Araújo Noguera era padre de varios dirigentes políticos, entre ellos, la excanciller María Consuelo Araújo y el excongresista Álvaro Araújo Castro. / Tomada de Twitter @luisferq

En la madrugada de este martes, a los 85 años, falleció en la Clínica Santa Fe de Bogotá Álvaro Araújo Noguera, reconocido político del departamento del Cesar. 

El deceso del exministro fue confirmado por su sobrino, Hernán Araújo Castro, actual gerente del Fondo Ganadero del Cesar, quien aseguró que el también exsenador luchó durante mucho tiempo “con enfermedades propias de la edad”.  

No obstante, lamentó que, dadas las circunstancias causadas por la emergencia sanitaria del coronavirus, “no hay transporte aéreo y no se puede hacer velorio”, por lo que la familia optó por cremarlo y esperar que sus cenizas sean trasladadas a Valledupar. 

Araújo se destacó como un reconocido líder político del Cesar, promoviendo su fundación e impulsando su desarrollo a través de diferentes cargos públicos y de elección popular. 

El dirigente era hermano de la fallecida periodista y exministra de Cultura, Consuelo Araújo Noguera, una de las promotoras del Festival de la Leyenda Vallenata, quien fue asesinada en 2001 a manos de la guerrilla de las Farc, que la mantuvo secuestrada varios días.  

Álvaro Araújo Noguera también es padre de varios dirigentes de la política del Cesar, entre ellos, la excanciller María Consuelo Araújo y el excongresista Álvaro Araújo Castro. 

Figuras como el expresidente Álvaro Uribe lamentaron el fallecimiento: "Nuestro sentimiento de pesar a María Consuelo (Conchi), Sergio, Álvaro, a toda la familia".

En 2010, Álvaro Araújo Noguera y su hijo Álvaro Araújo Castro, salieron airosos de una investigación que se les adelantaba como presuntos responsables del secuestro del dirigente de la Región, Víctor Ochoa Daza.

Parapolítica en el Cesar

Caía el telón del convulsionado 2006 cuando la Corte vinculó a Álvaro Araújo Castro al proceso parapolítico aduciendo que se benefició electoralmente en zonas de influencia de los paramilitares comandados por Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40. El 15 de febrero de 2007 se ordenó su detención junto con cinco parlamentarios más del Cesar y Magdalena. Pero, a diferencia de sus colegas, su medida de aseguramiento no sólo fue por los delitos de concierto para delinquir agravado y constreñimiento al elector, sino por secuestro. Familiares del político Víctor Ochoa Daza lo acusaron de instigar su plagio a principios de 2002 con propósitos políticos.

Una vez estalló la noticia de su captura, su hermana, María Consuelo Araújo, entonces Canciller de la República, renunció a su cargo. El caso fue tomando trascendencia y mientras las acusaciones procesales y las defensas mediáticas iban y venían, Álvaro Araújo dimitió a su curul en el Congreso el 27 de marzo de 2007. Arguyó entonces que no tenía garantías de un proceso justo. El expediente pasó a la Fiscalía y tuvo un súbito giro cuando se ordenó la captura de su padre, el ex ministro Álvaro Araújo Noguera, también relacionado en el episodio del secuestro del dirigente Ochoa Daza. Meses después se conoció la noticia de que en una finca en Venezuela fue encontrado y posteriormente deportado por las autoridades de ese país Araújo Noguera.

Un fiscal de la Unidad Antisecuestro prosiguió la investigación contra el ex senador y su padre, quienes alegaron con pruebas y testigos su inocencia. De hecho, en entrevista con la revista Semana, Víctor Ochoa Daza —el afectado— dijo textualmente que no creía que los Araújo fueran unos secuestradores. No obstante, ambos fueron acusados. La medida fue apelada y se ordenó una ruptura procesal. El caso de Álvaro Araújo Noguera, finalmente, fue archivado y se decretó su libertad. Su hijo, Araújo Castro, también resultó absuelto del delito de secuestro, pero fue llamado a juicio por el delito de concierto para delinquir.