Familiares de diputados asesinados pidieron verdad y un acto público de perdón a las Farc

Conocer la verdad por parte de las Farc de lo que realmente ocurrió, primero en el secuestro y luego en el asesinato. Realizar en la ciudad de Cali un acto público de perdón y reivindicación del sacrificio de los diputados, por parte de esa guerrilla, una vez aprobado el acuerdo de paz en el plebiscito del 2 de octubre. Y también la entrega de los objetos personales que los diputados tuvieron durante su cautiverio, tales como vestidos, escritos o artesanías.

Fue lo que le pidieron hoy los nueve familiares de los diputados del Valle del Cauca que fueron secuestrados y después asesinados el 18 de junio de 2007 por las Farc, tras una reunión privada que se llevó a cabo entre las 9:00 de la mañana y la 1:00 de la tarde de este sábado en La Habana (Cuba) con los comandantes de esa guerrilla Pablo Catatumbo, Iván Márquez y Joaquín Gómez. Un encuentro que se logró gracias a las gestiones del Gobierno, la Fundación El Arte de Vivir, el gobierno de Noruega, Naciones Unidas, el padre Francisco de Roux y Monsenor Darío Monsalve.

Los familiares de los diputados asistentes al encuentro fueron Diana Echeverry Gómez, Sebastián Arismendy Mesa, Patricia Nieto Núñez, Carolina Charry Sánchez, Diego Quintero Herrero, Fabiola Perdomo Estrada, Ángela Giraldo Cadavid, Efraín Hoyos García y John Jairo Hoyos García. En un comunicado público, señalaron que la reunión se desarrolló “en un ambiente tenso pero respetuoso, en el cual en primer lugar cada uno expresó de manera clara y concisa su sentimientos, dudas y cuestionamientos”.

Asimismo, revelaron que los miembros del secretariado de las Farc  les manifestaron “su deseo de pedir perdón y dialogaron sobre los cuestionamientos planteados”. “No vamos a evadir nuestra responsabilidad. Ellos estaban en nuestras manos. La muerte de los diputados fue lo más absurdo de lo que he vivido en la guerra. El episodio más vergonzoso. No nos enorgullecemos de ello. Hoy con humildad sincera hacemos un reconocimiento público y pedimos perdón. Ojalá ustedes nos perdonen”, les dijo Pablo Catatumbo, quien además aclaró que Sigifredo López, único sobreviviente, no estuvo relacionado ni con el secuestro ni con el asesinato.

Precisamente, además de las peticiones ya mencionadas, los familiares de los asambleístas sacrificados solicitaron igualmente que las Farc hagan una declaración expresa de perdón a López y su familia. Y también le pidieron al Gobierno la reivindicación de la memoria y sacrificio de los diputados, declarándolos “héroes nacionales de paz” y la construcción de un monumento nacional en su memoria.

“Los familiares manifiestan que los diputados lucharon incansablemente durante los cinco años y medio de secuestro, expresando en cada una de las pruebas de supervivencia, la urgencia de un acuerdo humanitario que permitiera la liberación de todos los secuestrados y la necesidad de un acuerdo de paz que permitiera encontrar una salida al conflicto. Hoy más que nunca, ratificamos la voluntad de nuestros seres queridos masacrados de un acuerdo de paz para Colombia. Nuestro sufrimiento y la muerte de los diputados no pueden ser en vano sino que debe convertirse en un ejemplo para honrar su memoria y evitar su olvido.  Convocamos a todos los colombianos a dejar a un lado nuestros dolores personales por el bien del país y apoyar decididamente la búsqueda de la paz”, concluye el comunicado.

Conocer la verdad por parte de las Farc de lo que realmente ocurrió, primero en el secuestro y luego en el asesinato. Realizar en la ciudad de Cali un acto público de perdón y reivindicación del sacrificio de los diputados, por parte de esa guerrilla, una vez aprobado el acuerdo de paz en el plebiscito del 2 de octubre. Y también la entrega de los objetos personales que los diputados tuvieron durante su cautiverio, tales como vestidos, escritos o artesanías.

Fue lo que le pidieron hoy los nueve familiares de los diputados del Valle del Cauca que fueron secuestrados y después asesinados el 18 de junio de 2007 por las Farc, tras una reunión privada que se llevó a cabo entre las 9:00 de la mañana y la 1:00 de la tarde de este sábado en La Habana (Cuba) con los comandantes de esa guerrilla Pablo Catatumbo, Iván Márquez y Joaquín Gómez. Un encuentro que se logró gracias a las gestiones del Gobierno, la Fundación El Arte de Vivir, el gobierno de Noruega, Naciones Unidas, el padre Francisco de Roux y Monsenor Darío Monsalve.

Los familiares de los diputados asistentes al encuentro fueron Diana Echeverry Gómez, Sebastián Arismendy Mesa, Patricia Nieto Núñez, Carolina Charry Sánchez, Diego Quintero Herrero, Fabiola Perdomo Estrada, Ángela Giraldo Cadavid, Efraín Hoyos García y John Jairo Hoyos García. En un comunicado público, señalaron que la reunión se desarrolló “en un ambiente tenso pero respetuoso, en el cual en primer lugar cada uno expresó de manera clara y concisa su sentimientos, dudas y cuestionamientos”.

Asimismo, revelaron que los miembros del secretariado de las Farc  les manifestaron “su deseo de pedir perdón y dialogaron sobre los cuestionamientos planteados”. “No vamos a evadir nuestra responsabilidad. Ellos estaban en nuestras manos. La muerte de los diputados fue lo más absurdo de lo que he vivido en la guerra. El episodio más vergonzoso. No nos enorgullecemos de ello. Hoy con humildad sincera hacemos un reconocimiento público y pedimos perdón. Ojalá ustedes nos perdonen”, les dijo Pablo Catatumbo, quien además aclaró que Sigifredo López, único sobreviviente, no estuvo relacionado ni con el secuestro ni con el asesinato.

Precisamente, además de las peticiones ya mencionadas, los familiares de los asambleístas sacrificados solicitaron igualmente que las Farc hagan una declaración expresa de perdón a López y su familia. Y también le pidieron al Gobierno la reivindicación de la memoria y sacrificio de los diputados, declarándolos “héroes nacionales de paz” y la construcción de un monumento nacional en su memoria.

“Los familiares manifiestan que los diputados lucharon incansablemente durante los cinco años y medio de secuestro, expresando en cada una de las pruebas de supervivencia, la urgencia de un acuerdo humanitario que permitiera la liberación de todos los secuestrados y la necesidad de un acuerdo de paz que permitiera encontrar una salida al conflicto. Hoy más que nunca, ratificamos la voluntad de nuestros seres queridos masacrados de un acuerdo de paz para Colombia. Nuestro sufrimiento y la muerte de los diputados no pueden ser en vano sino que debe convertirse en un ejemplo para honrar su memoria y evitar su olvido.  Convocamos a todos los colombianos a dejar a un lado nuestros dolores personales por el bien del país y apoyar decididamente la búsqueda de la paz”, concluye el comunicado.