El Gobierno nacional descartó este viernes acudir a la figura de la conmoción interior a propósito de la crisis que se desató por la decisión que tomó la Jurisdicción Especial de Paz de negar la extradición de Jesús Santrich y ordenar su libertad. La vicepresidenta Marta Lucía Ramírez dijo que esa posibilidad nunca ha estado sobre la mesa y que los rumores que ha habido al respecto son una "irresponsabilidad".
Poco tiempo después, desde la ciudad de Cúcuta, el líder natural de la bancada de Gobierno, el Centro Democrático, dijo con certeza que el exmiembro de la hoy desarmada guerrilla será extraditado. “La justicia de la Fiscalía General de la Nación, los jueces que requieren la extradición han probado que esos delitos fueron cometidos después de la firma de los acuerdos. Debe ser extraditado. En el Centro Democrático sabemos que, con el buen criterio del presidente Iván Duque, de acuerdo con los instrumentos legales, finalmente ‘Santrich’ será extraditado”.
Cuando se decreta la conmoción interior, el presidente contaría con facultades extraordinas, según lo establece la carta política. Entre ellas, firmar la extradición de Santrich. “(El presidente) tendrá las facultades estrictamente necesarias para conjurar las causas de la perturbación e impedir la extensión de sus efectos. Los decretos legislativos que dicte el Gobierno podrán suspender las leyes incompatibles con el Estado de Conmoción y dejarán de regir tan pronto como se declare restablecido el orden público”, dice la Constitución.