:format(jpeg)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elespectador/5ZAJQFUD5BHGFJ6VXGRVYZGHC4.jpg)
Durante una entrevista que atendió este domingo el padre Jesús Hernán Orjuela, mejor conocido como el padre Chucho, el sacerdote confesó que el nuevo gobierno presidido por Iván Duque y Marta Lucía Ramírez le hicieron una especial petición antes del 7 de agosto: exorcizar la Casa de Nariño.
En el programa La Red, de Caracol Televisión, Orjuela afirmó que la intención de los que llegarán a la residencia presidencial es servir con amor y sacar todas las cosas que no sean buenas, como odios y rencores que polarizan al país. Según el padre, la intención de ambos es empezar el gobierno con la bendición de Dios.
De manera jocosa, el sacerdote les dijo a los televidentes que tan pronto se surtiera el proceso de exorcismo, les contaría cuántos demonios encontró en el Palacio que ahora será ocupado por Duque. No obstante, dijo que “más que ir a sacar demonios, voy a llevarles amor el amor de Cristo”.
Sigue a El Espectador en WhatsAppJesús Orjuela, como se sabe, ofrece eucaristías en el barrio Castilla, ubicado en localidad de Kennedy, en Bogotá, y afirmó que cuenta con el permiso para realizar este tipo de prácticas religiosas. Es de recordar que durante la campaña, tanto Duque como Ramírez reafirmaron insistentemente su fe en el catolicismo.
Después del revuelo que causó la situación, el padre 'Chucho' aclaró que lo que había dicho en el programa televisivo no era cierto. "Queridos hermanos de Colombia, quiero aclarar que ni el presidente, Iván Duque; ni la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez, me han llamado a sacar demonios de la Casa de Nariño", aseguró Orjuela.
Sin hacer alusión directa, el hijo del presidente Juan Manuel Santos, Martín Santos, aparentemente dio respuesta a la intención del mandatario entrante y de su vicepresidenta a través de Twitter.