Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La pelea del excomisionado de paz, Luis Carlos Restrepo, contra el presidente Juan Manuel Santos, el Partido de la U y la justicia estaba casada y ahora que abandonó el país, desde la clandestinidad, realizó una fuerte arremetida, que planteó como el decálogo para retomar el rumbo.
Restrepo no dejó títere con cabeza y al primero que increpó fue al presidente Santos, de quien afirmó que “el uribismo se equivocó al elegirlo como su candidato porque aunque se ganaron las elecciones se perdió el Gobierno” por lo cual propuso una campaña contra el segundo mandato del jefe de Estado denominada ‘No a la reelección de la mentira’.
Para la retoma del poder, Restrepo presentó un plan en el que consideró que es necesario que el uribismo busque tres líderes: un candidato a la presidencia de la república, quien se enfrentaría en un proceso electoral al mandatario Santos; una cabeza de lista al Senado, que defienda las tesis del uribismo en el parlamento y, por último, un cabeza de lista para una asamblea nacional constituyente.
Es precisamente esta última propuesta la que más levantó ampolla. Pues la intención con esta asamblea es retomar el Gobierno con un periodo presidencial de ocho años y con posibilidad de reelección. Además, esta iniciativa plantea, según Restrepo, dar garantías legales a los miembros de la Fuerza Pública, y acabar con el carrusel de pensiones y la corrupción en tribunales y cortes.
Frente al Partido de la U también dejó abierta la posibilidad de acabar con la colectividad si no defiende las tesis del expresidente Uribe: la seguridad democrática, la confianza inversionista y la cohesión social. “Plantear un debate público en torno al futuro del Partido de la U, o si se debe formar una nueva colectividad política. Si se decide continuar con el Partido de la U debe hacerse una reforma de estatutos que incluya la Seguridad Democrática en sus principios ideológicos. Y democratizar su estructura, convertida hoy en simple trampolín electoral de los congresistas en ejercicio”, sostiene Restrepo.
Fue tan radical el planteamiento de Restrepo que no tuvo asidero ni en el círculo más cercano del uribismo. El senador Juan Carlos Vélez manifestó que estos son temas que no se han contemplado: “Una reforma constitucional sólo se daría si no somos capaces de sacar adelante la reforma a la justicia. El partido de la U nació con el uribismo y debe defender sus tesis, pero de ahí a acabar con la colectividad estamos lejos”.
El presidente del Partido Conservador, Efraín Cepeda, dijo que “el partido está en la hoja de ruta de la lucha contra la pobreza, la calidad de vida y no creo que se deba distraer al país con un tema como la asamblea nacional constituyente. Una propuesta como esta es descabellada, por el contrario, creo que el excomisionado debe volver y poner la cara a la justicia”.
Para el senador Roy Barreras “no se puede confundir la defensa de la obra del Gobierno Uribe con apostarle a la destrucción del Gobierno de Santos. La propuesta de Luis Carlos Restrepo es delirante”.
Aunque la propuesta de Restrepo no ha tenido acogida, las diferencias entre Uribe y Santos han venido allanando el camino para que se presenten planteamientos de reformas radicales que pueden ganar adeptos en los diferentes sectores políticos de país.