Desde el miércoles en la noche lo había anunciado por Twitter: “Sí, me tocó”. Fue la respuesta del decano de economía de la Universidad de los Andes al reiterativo “¿profesor, se va de ministro?”, con el que sus estudiantes bombardearon su cuenta. A través de la misma red social el presidente Juan Manuel Santos lo confirmó este jueves en la tarde: “El nuevo Ministro de Salud será Alejandro Gaviria. Bienvenido al gabinete para trabajar por la salud de todos los colombianos”. Pocos minutos después el presidente le agradeció a la saliente ministra, Beatríz Londoño, su paso por la cartera.
Durante los ocho meses que estuvo al frente del ministerio los esfuerzos de Londoño por sanear un sistema de salud herido por la corrupción, fueron calificados por los gremios de las EPS y Clínicas y Hospitales como “insuficientes”. Ahora el reto tendrá que ser asumido por el ingeniero civil, magister y doctor en economía Alejandro Gaviria, quien con su gestión en los sectores públicos y privados se ha ganado el voto de confianza que hoy recibe del presidente.
Gaviria, quien en el 2000 estuvo al frente de la subdirección de Fedesarrollo y en 2002 del Departamento Nacional de Planeación, es columnista y miembro del consejo editorial del periódico El Espectador y desde 2004 está vinculado a la Universidad de los Andes donde funge como decano de la facultad de Economía.
Al economista le tocará enfrentar uno de los peores momentos en la historia del sector que –por cuenta de las gigantescas deudas que existen entre EPS, clínicas y hospitales, y el Fosyga– ha sacrificado la atención a los usuarios y su derecho a la salud. En el último año la red hospitalaria ha anunciado que su colapso es inminente y las EPS han sido duramente cuestionadas por sus manejos financieros, sumados al deterioro en la prestación de servicios a los usuarios; incluso hay quienes proponen eliminarlas del sistema.
Gaviria no la tiene fácil, por eso es entendible que a través de Twitter también confiese que con el ministerio al hombro está “muerto de susto”.