Las controversias en el Pacto Histórico por el renglón étnico en lista al Senado

La conformación de listas al Congreso generó fisuras al interior de la mayoría de los partidos políticos. Las cuotas de los grandes electores, la ubicación en las listas y las dificultades para participar que denunciaron los nuevos liderazgos, fueron solo algunos de los disgustos que se repitieron en las diferentes colectividades. El Pacto Histórico (PH), movimiento que agrupa partidos y candidaturas de centro-izquierda, fue uno de los mejores ejemplos de esta situación, pues desde antes de que se presentaran las candidaturas ya había quejas por cómo se incluyeron a mujeres y jóvenes, así como la representación de cada colectividad en las listas.

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Pero otro de los temas que generó molestias al interior del PH fue la representación de los líderes afrodescendientes en las listas. Desde que se oficializaron las candidaturas de la coalición de centro- izquierda, la precandidata presidencial Francia Márquez (Polo Democrático y Movimiento AICO) manifestó su molestia por el hecho de que no se “honrara la palabra”. Aunque no hizo referencia directa al tema, varios líderes afro comentaron las publicaciones de Márquez, apoyándola en su petición de dar más visibilidad a esta población con una ubicación en los primeros 15 puestos en la lista a la cámara alta.

“Es momento de que el Pacto Histórico reconozca la dignidad de todas las personas que han sufrido las opresiones raciales, de género y de clase”. “Seguimos sembrando esperanzas y estamos convencid@s que junt@s construiremos una nueva Nación. Mis abuel@s me enseñaron que la palabra se honra, porque la palabra vale” (sic). “El Pacto Histórico es con las mujeres, los pueblos negros e indígenas, campesinos, las diversidades LGTBIQ+ y las juventudes. Es con las mayorías históricamente oprimidas, violentadas y empobrecidas o no será”. Esos fueron fragmentos de algunos de los mensajes que escribió la precandidata presidencial del Polo y AICO, en los que evidenció su malestar.

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Como respuesta a los requerimientos de la población afro que apoya al Pacto Histórico, el senador Gustavo Petro, una de las caras visibles de esa coalición, pidió este lunes que el #11 de la lista al Senado sea reservado para un líder afrodescendiente y correr las demás candidaturas un número. “Le solicito a los partidos firmantes del Pacto histórico recuperar el renglón 11 para afrodescendientes y correr los inscritos hombres al senado un puesto a partir del once”.

Si bien la conformación de las listas estuvo a cargo del colegio electoral de los partidos que hacen parte del Pacto Histórico, el senador Petro ya había manifestado la necesidad de darle más representación a la población afro dentro del movimiento. Durante un foro que se realizó semanas atrás sobre las problemáticas de las comunidades afrocolombianas y la diversidad étnica del país, el precandidato presidencial de la Colombia Humana manifestó que el tema de racismo es insostenible y por lo tanto reiteró en la búsqueda de un pacto que no parta de la visión blanca de lo que se debe hacer sino que, como una primera indemnización a la comunidad afro, hay que entregarle autonomía y poder.

“Las consultas de nada sirven si las poblaciones negras no tienen autonomía y poder. El litoral pacífico debería ser autonómo, que decidan qué quieren hacer con la tierra, el mar y la bioeconomía. Ellos deben decidir y que el Estado se plegue a la decisiones”, dijo el senador de Colombia Humana, quien también propuso que el sistema financiero capte ahorro de Bogotá para que lo administre el pueblo negro pues de esa forma, dijo, “se va haciendo prosperidad, pero más allá de lo que piense el hombre blanco. Esa diferenciación es la que puede hacer rica a Colombia”.

Durante ese espacio, el senador coincidió en la mayoría de aspectos con las premisas que planteó Francia Márquez, quien pidió partir la discusión de reconocer que la esclavitud y la mentalidad esclavista aún existe en el país. Márquez, quien es la única candidata afro de esta contienda presidencial, criticó a varios de los precandidatos que intervinieron en el foro asegurando que “muchas de las palabras que hemos escuchado las hemos escuchado toda la vida”. Por eso, dijo, quiere llegar a la Casa de Nariño pues se cansó “de escuchar el discurso de espaldas”. Márquez también advirtió que decir que hay que organizarse para inversión es seguir viendo la problemática con “los lentes de la esclavitud y la menoría de edad”.

La conformación de listas al Congreso generó fisuras al interior de la mayoría de los partidos políticos. Las cuotas de los grandes electores, la ubicación en las listas y las dificultades para participar que denunciaron los nuevos liderazgos, fueron solo algunos de los disgustos que se repitieron en las diferentes colectividades. El Pacto Histórico (PH), movimiento que agrupa partidos y candidaturas de centro-izquierda, fue uno de los mejores ejemplos de esta situación, pues desde antes de que se presentaran las candidaturas ya había quejas por cómo se incluyeron a mujeres y jóvenes, así como la representación de cada colectividad en las listas.

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Pero otro de los temas que generó molestias al interior del PH fue la representación de los líderes afrodescendientes en las listas. Desde que se oficializaron las candidaturas de la coalición de centro- izquierda, la precandidata presidencial Francia Márquez (Polo Democrático y Movimiento AICO) manifestó su molestia por el hecho de que no se “honrara la palabra”. Aunque no hizo referencia directa al tema, varios líderes afro comentaron las publicaciones de Márquez, apoyándola en su petición de dar más visibilidad a esta población con una ubicación en los primeros 15 puestos en la lista a la cámara alta.

“Es momento de que el Pacto Histórico reconozca la dignidad de todas las personas que han sufrido las opresiones raciales, de género y de clase”. “Seguimos sembrando esperanzas y estamos convencid@s que junt@s construiremos una nueva Nación. Mis abuel@s me enseñaron que la palabra se honra, porque la palabra vale” (sic). “El Pacto Histórico es con las mujeres, los pueblos negros e indígenas, campesinos, las diversidades LGTBIQ+ y las juventudes. Es con las mayorías históricamente oprimidas, violentadas y empobrecidas o no será”. Esos fueron fragmentos de algunos de los mensajes que escribió la precandidata presidencial del Polo y AICO, en los que evidenció su malestar.

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Como respuesta a los requerimientos de la población afro que apoya al Pacto Histórico, el senador Gustavo Petro, una de las caras visibles de esa coalición, pidió este lunes que el #11 de la lista al Senado sea reservado para un líder afrodescendiente y correr las demás candidaturas un número. “Le solicito a los partidos firmantes del Pacto histórico recuperar el renglón 11 para afrodescendientes y correr los inscritos hombres al senado un puesto a partir del once”.

Si bien la conformación de las listas estuvo a cargo del colegio electoral de los partidos que hacen parte del Pacto Histórico, el senador Petro ya había manifestado la necesidad de darle más representación a la población afro dentro del movimiento. Durante un foro que se realizó semanas atrás sobre las problemáticas de las comunidades afrocolombianas y la diversidad étnica del país, el precandidato presidencial de la Colombia Humana manifestó que el tema de racismo es insostenible y por lo tanto reiteró en la búsqueda de un pacto que no parta de la visión blanca de lo que se debe hacer sino que, como una primera indemnización a la comunidad afro, hay que entregarle autonomía y poder.

“Las consultas de nada sirven si las poblaciones negras no tienen autonomía y poder. El litoral pacífico debería ser autonómo, que decidan qué quieren hacer con la tierra, el mar y la bioeconomía. Ellos deben decidir y que el Estado se plegue a la decisiones”, dijo el senador de Colombia Humana, quien también propuso que el sistema financiero capte ahorro de Bogotá para que lo administre el pueblo negro pues de esa forma, dijo, “se va haciendo prosperidad, pero más allá de lo que piense el hombre blanco. Esa diferenciación es la que puede hacer rica a Colombia”.

Durante ese espacio, el senador coincidió en la mayoría de aspectos con las premisas que planteó Francia Márquez, quien pidió partir la discusión de reconocer que la esclavitud y la mentalidad esclavista aún existe en el país. Márquez, quien es la única candidata afro de esta contienda presidencial, criticó a varios de los precandidatos que intervinieron en el foro asegurando que “muchas de las palabras que hemos escuchado las hemos escuchado toda la vida”. Por eso, dijo, quiere llegar a la Casa de Nariño pues se cansó “de escuchar el discurso de espaldas”. Márquez también advirtió que decir que hay que organizarse para inversión es seguir viendo la problemática con “los lentes de la esclavitud y la menoría de edad”.