La que para muchos era la número dos del Gobierno Petro, la joven politóloga que no ha cumplido 30 años y llama a despedir o a contratar ministros, acaba de quedar por fuera de su cargo. El presidente Petro confirmó que tanto ella como Armando Benedetti, embajador en Venezuela, salen de sus puestos mientras avanza la investigación por el episodio de la niñera Marelbys Meza y las presuntas interceptaciones ilegales en su contra.
Contexto: Petro retira temporalmente del Gobierno a Laura Sarabia y Armando Benedetti
Tan pronto se conoció la decisión, la hasta hoy jefa de gabinete se pronunció en su cuenta de Twitter: “Tengo plena tranquilidad de haber obrado correctamente, con integridad y sin ningún interés particular”, escribió.
En el mismo pronunciamiento anunció que estará presta “a rendir todas las explicaciones necesarias para el esclarecimiento de los hechos” y que “luchará profundamente” por defender su reputación y buen nombre “de todas las acciones malintencionadas que han rodeado todos estos episodios”.
Su mensaje lo concluyó con un agradecimiento a cada uno de los miembros de la familia presidencial: Verónica, Sofía, los dos Nicolás, Antonella y Andrea. “Cuenten con mi cariño cada día”, dijo.
El episodio que tiene - por ahora - por fuera a la jefa de gabinete inició con un hurto en su residencia en Bogotá la última semana de enero. Según ella, lo que se perdió fue una maleta con USD 7.000 pero otras versiones han apuntado incluso a $150 millones. Tras el robo, la que para entonces era la niñera de su hijo, Marelbys Meza, fue conducida a un sótano cercano a la Casa de Nariño y, contra su voluntad según denunció, sometida a una prueba de polígrafo. El caso adquirió otras dimensiones al conocerse que la exniñera y otra empleada de esa casa habían sido interceptadas telefónicamente, de forma ilegal. Asimismo, que el embajador Benedetti estaría involucrado en el episodio.
