Los gozosos y dolorosos del gobierno Petro en el Congreso al cierre de la legislatura
El gobierno de Gustavo Petro fue en sus primeros cinco meses una aplanadora, pero poco a poco se fue desgastando. Esta es la primera entrega del balance de la Fundación Paz y Reconciliación (Pares) sobre el Congreso.
La primera legislatura del Congreso 2022- 2026 (20 de julio 2022-20 de junio 2023), estuvo marcada por un presidente Gustavo Petro que se apersonó de las iniciativas legislativas, algo que contrasta mucho con el inicio del Gobierno Duque, el cual marcó su primer año de relación con el Congreso objetando el proyecto de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Al contrario de Duque, el Gobierno Petro ha tenido un papel más activo, reflejado a lo largo de esta primera legislatura en proyectos que llevaron a todos los partidos políticos e incluso a la sociedad colombiana en su conjunto a repensarse y debatir acerca de su modelo de sociedad. Un Gobierno que tiene una gran habilidad de poner agenda constantemente y poner como protagonista la discusión política en el país.
El gobierno Petro en sus primeros cinco meses fue una aplanadora y poco a poco por diferentes circunstancias se fue desgastando al punto que sus niveles gobernabilidad han ido disminuyendo drásticamente. También, se observará cómo se han venido reconfigurando las mayorías en el legislativo y cómo se encuentran actualmente, además de qué impacto tiene esto sobre diferentes proyectos estratégicos que el Gobierno ha venido priorizando. Adicionalmente, se presentará el estado de la coalición de oposición y las modificaciones en la composición del Congreso por la salida de varios congresistas.
Una imagen que no cambia
El Congreso es una de las instituciones de la democracia colombiana que mayores niveles de desfavorabilidad tiene. Para las elecciones del 2022 se escogieron algunas caras que, por primera vez, llegaban al legislativo: fueran herederos de caudales electorales de diferentes clanes o porque saltaban del activismo a la política electoral.
Con la entrada de esos nuevos congresistas, se esperaba que el Congreso pudiera sufrir un cambio respecto a su imagen, algo que, hasta el momento, no se ha reflejado en las encuestas. De hecho, al tomar datos de Invamer Poll, desde que inició a sesionar este nuevo Congreso el 20 de julio de 2022, día de su posesión, continúa con los mismos índices de aprobación y desaprobación. Para julio del 2022 la desaprobación se encontraba en 73% y para abril de 2023 el mismo dato se encontraba en 69%. Respecto a la aprobación para julio del 2022 estaba en 19%, mientras que en abril de 2023 se ubicó en 21%.
Estos datos reflejan lo que se ha advertido durante la última década por parte de la Fundación Paz y Reconciliación (Pares) acerca de la poca confianza que se tiene en las instituciones como el Congreso o los partidos políticos, instituciones fundamentales para la democracia representativa.
👀 Imagen del Congreso (julio 2022 - abril 2023)
*Democracia y Gobernabilidad. Fundación Paz y Reconciliación (Pares). Fuente: Invamer.
Los cuidados evidentemente no ven en los partidos ni en el Congreso instituciones que sean un medio efectivo de representación de sus intereses. En ese sentido, se hacen necesarias reformas que estén encaminadas en hacer más transparentes y eficientes estas instituciones, con el objetivo de generar mayores niveles de confianza y legitimidad en la ciudadanía colombiana. Por el momento pareciera no haber interés de llevar a cabo estas reformas.
Paralelo a lo anterior, se han generado otras distorsiones democráticas por parte del Consejo CNE, el cual ha otorgado en este mismo periodo de análisis 17 personerías jurídicas nuevas; en su mayoría, con argumentos cada vez más cuestionables, a tal punto de completar, al cierre de este informe, 35 partidos políticos en el país con capacidad de otorgar avales y competir en las elecciones de 2023.
Cronología del Congreso y el Gobierno: de los gozosos a los dolorosos
El Congreso inicio el 20 de julio de 2022 otorgándole la primera victoria a Gustavo Petro mediante la elección de David Racero como presidente de la Cámara y de Roy Barreras como presidente del Senado, ambos integrantes del Pacto Histórico. Con la elección de Barreras, el Gobierno se aseguró de tener un muy buen operador político en el Congreso, el cual manejó con maestría solemne la coalición de gobierno y puso a marchar sus reformas durante los primeros 5 meses.
Los gozosos
Barreras, junto con el ministro del Interior, Alfonso Prada, lograron en el primer tramo de la legislatura: Escoger Contralor General de la República, cercano al entonces presidente del Senado; elegir magistrados en el CNE afines al Gobierno y su coalición. Por otro lado, aprobaron el Acuerdo de Escazú; el Presupuesto General de la Nación (PGN), con las modificaciones realizadas al texto original presentado por el Gobierno Duque; la Reforma Tributaria liderada por el ministro de Hacienda José Antonio Ocampo y la prórroga a la Ley 418 o ley de Paz Total. De igual manera fuera aprobado la creación del Ministerio de la Igualdad. Además de que logró pasar a segunda ronda de debates los proyectos de Acto Legislativo como el Campesino como Sujeto de Derechos, Jurisdicción Agraria, Cannabis de Uso Adulto (proyecto de Juan Carlos Losada) y Reforma Política.
Los dolorosos
Para el primer semestre del 2023 la denominada “luna de miel” del Gobierno Petro en el Congreso comenzó a deteriorarse. En febrero se citaron a sesiones extraordinarias para discutir Plan Nacional de Desarrollo (PND) y la Reforma Salud (fundamental para entender las crisis del Gobierno). Además de que se radicó la Ley de Humanización Penitenciaria, que al parecer nació sin los votos.
El PND fue avanzando en sus discusiones en las Comisiones Tercera y Cuarta tanto de Senado y Cámara, que son las comisiones económicas; pero la Reforma a la Salud no logró avanzar en ese tiempo por el manejo político dado por la entonces ministra de Salud, Carolina Corcho.
En el marco de las discusiones en torno a dicha reforma se dio el primer “revolcón ministerial”, que dejó como saldo el cambio de tres ministros: Educación, Cultura y Deporte. La salida del ministro de Educación, Alejandro Gaviria, se debió a sus profundas diferencias respecto a la reforma liderada en ese entonces por la ministra Corcho. Las otras ministras salientes fueron Patricia Ariza (Cultura) y María Isabel Urrutia (Deporte). Esta última salpicada en un presunto escándalo de corrupción.
El inicio de las sesiones ordinarias se dio mediante el radicado tanto de la Reforma Laboral y Reforma Pensional. Paralelo a esto se estaba hundiendo la Reforma Política, reforma que inició como prioridad para el Gobierno, pero que al final el mismo Roy Barreras, creador de la reforma, la negó y dejó que se hundiera. Esta fue la segunda derrota en el legislativo para la que venía siendo la aplanadora liderada por Barreras y Prada. La primera fue la reforma política liderada por los senadores Ariel Ávila y Humberto de la Calle, la cual pretendía reformar la estructura y elección de los magistrados del CNE, así como de la composición de la Registraduría.
La reforma de la discordia
Para finales de abril de 2023 la Reforma a la Salud, en parte por la que se había citado a sesiones extras, no avanzaba, mientras que las tensiones con partidos de la coalición como la U o el Conservador venían creciendo desde la presentación de esta. Por ello, Petro decidió dar un segundo “revolcón” a su gabinete de ministros, empezando con la salida de la ministra de Salud, Carolina Corcho, pasando por el operador político del Gobierno, el ministro del Interior, Alfonso Prada. También dio salida a dos opositores de la Reforma a la Salud como José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda y Cecilia López, ministra de Agricultura. Además de ellos salieron el ministro de Transporte, el ministro de Ciencia y la ministra de las TIC.
La reconfiguración de la gobernabilidad de Petro
Con base en estos cambios, la relación con el partido Conservador y el Gobierno se deterioró, por lo que esta colectividad liderada por Efraín Cepeda salió de la coalición y se declaró independiente. Aun así, este partido votó positivo el PND, liderado por el director de Planeación Nacional, Jorge Iván Gonzáles y acompañado por los ministros entrantes de Hacienda e Interior, Ricardo Bonilla y Luis Fernando Velasco, respectivamente. El PND fue aprobado y, hasta hoy, es de una de las últimas grandes victorias del Gobierno en el Congreso.
El segundo partido de la coalición de gobierno en saltar a la independencia fue el partido de la U, por las mismas razones del partido Conservador. Paralelo a esto, el mayor operador político que ha tenido el ejecutivo hasta el momento, Roy Barreras, salía del Congreso. Un fallo del Consejo de Estado anuló su elección por doble militancia.
Después de tres meses de desgaste político, dejando ministros y partidos a su paso, la Comisión Séptima aprobó en primer debate la Reforma a la Salud. Con la llegada del nuevo ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, político y médico; junto con el nuevo ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, se logró destrabar el debate.
Otra derrota que sufrió el Gobierno fue la declaración de nulidad en la elección del Contralor General de la República por una demanda de los representantes Jennifer Pedraza, de Dignidad (Independiente) y Cristian Avendaño, del partido Verde (Gobierno). El Consejo de Estado les dio la razón a los representantes y determinó la elección del Contralor tuvo vicios en su trámite desde la Mesa Directiva del Congreso. Por ello, se debe iniciar la elección desde el inicio de la conformación de la lista de aspirantes. El Gobierno ya no cuenta con la coalición que eligió en 2022 a Carlos Hernán Rodríguez y parece que no tendrá nada fácil escoger de nuevo un Contralor cercano.
El impacto del escándalo Benedetti-Sarabia
Tras el escándalo de Armando Benedetti, exembajador en Venezuela y Laura Sarabia, antigua jefa de gabinete se solicitó al Congreso, por medio de la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes, que es la única facultada para investigar al presidente, realizar las pesquisas correspondientes a lo señalado por Benedetti en los audios filtrados por Semana y la revista Cambio. La investigación se da por las denuncias radicadas en dicha comisión por Federico Gutiérrez y por los congresistas Miguel Uribe y Miguel Polo Polo, quienes hacen parte de la oposición al Gobierno Petro.
A raíz de la salida de Roy Barreras del Congreso, esta corporación tuvo que elegir nuevo presidente para los días restantes de esta primera legislatura. Alexander López Maya fue elegido en reemplazo de Barreras, un político más cercano al presidente Petro en su manera de pensar, pero que no posee la misma habilidad política para darle celeridad a los debates de las reformas como lo hizo ya en el pasado Roy Barreras.
Finalmente, las últimas semanas de esta legislatura estuvieron marcadas por victorias y derrotas en el legislativo para el Gobierno. Fueron aprobados en últimos debates los proyectos de acto de legislativo como Jurisdicción Agraria y Campesino como Sujeto de Derechos. Además de que la Reforma Pensional y la Ley de Adición Presupuestal lograron pasar a segundo debate en Senado, lo que las dejó vivas para la otra legislatura. Todo lo contrario pasó con Reforma Laboral que, por una continua falta de quórum, se ha evitado su debate en la Comisión Séptima de Cámara, aunque fue aprobado el informe de ponencia.
En lo que respecta a las perspectivas del Gobierno para la próxima legislatura, todo parece indicar que este continuará con la misma estrategia que viene manejando en los últimos meses: negociar con los congresistas y no con los partidos ni sus jefes. Si los congresistas obedecen a sus jefes políticos, como lo han venido haciendo, Gustavo Petro continuará con su estrategia de la radicalización democrática: la profundización de un gabinete de izquierdas y el llamado a calles para ejercer presión al Congreso para la aprobación de su paquete de reformas sociales, lo que continuará desgastando su coalición de Gobierno, a la par que sacrifica las posibilidades de que sus aliados políticos tengan opciones de quedar elegidos en las elecciones locales del próximo 29 de octubre de 2023.
👉 Lea más sobre el Congreso, el gobierno Petro y otras noticias del mundo político.
La primera legislatura del Congreso 2022- 2026 (20 de julio 2022-20 de junio 2023), estuvo marcada por un presidente Gustavo Petro que se apersonó de las iniciativas legislativas, algo que contrasta mucho con el inicio del Gobierno Duque, el cual marcó su primer año de relación con el Congreso objetando el proyecto de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
Al contrario de Duque, el Gobierno Petro ha tenido un papel más activo, reflejado a lo largo de esta primera legislatura en proyectos que llevaron a todos los partidos políticos e incluso a la sociedad colombiana en su conjunto a repensarse y debatir acerca de su modelo de sociedad. Un Gobierno que tiene una gran habilidad de poner agenda constantemente y poner como protagonista la discusión política en el país.
El gobierno Petro en sus primeros cinco meses fue una aplanadora y poco a poco por diferentes circunstancias se fue desgastando al punto que sus niveles gobernabilidad han ido disminuyendo drásticamente. También, se observará cómo se han venido reconfigurando las mayorías en el legislativo y cómo se encuentran actualmente, además de qué impacto tiene esto sobre diferentes proyectos estratégicos que el Gobierno ha venido priorizando. Adicionalmente, se presentará el estado de la coalición de oposición y las modificaciones en la composición del Congreso por la salida de varios congresistas.
Una imagen que no cambia
El Congreso es una de las instituciones de la democracia colombiana que mayores niveles de desfavorabilidad tiene. Para las elecciones del 2022 se escogieron algunas caras que, por primera vez, llegaban al legislativo: fueran herederos de caudales electorales de diferentes clanes o porque saltaban del activismo a la política electoral.
Con la entrada de esos nuevos congresistas, se esperaba que el Congreso pudiera sufrir un cambio respecto a su imagen, algo que, hasta el momento, no se ha reflejado en las encuestas. De hecho, al tomar datos de Invamer Poll, desde que inició a sesionar este nuevo Congreso el 20 de julio de 2022, día de su posesión, continúa con los mismos índices de aprobación y desaprobación. Para julio del 2022 la desaprobación se encontraba en 73% y para abril de 2023 el mismo dato se encontraba en 69%. Respecto a la aprobación para julio del 2022 estaba en 19%, mientras que en abril de 2023 se ubicó en 21%.
Estos datos reflejan lo que se ha advertido durante la última década por parte de la Fundación Paz y Reconciliación (Pares) acerca de la poca confianza que se tiene en las instituciones como el Congreso o los partidos políticos, instituciones fundamentales para la democracia representativa.
👀 Imagen del Congreso (julio 2022 - abril 2023)
*Democracia y Gobernabilidad. Fundación Paz y Reconciliación (Pares). Fuente: Invamer.
Los cuidados evidentemente no ven en los partidos ni en el Congreso instituciones que sean un medio efectivo de representación de sus intereses. En ese sentido, se hacen necesarias reformas que estén encaminadas en hacer más transparentes y eficientes estas instituciones, con el objetivo de generar mayores niveles de confianza y legitimidad en la ciudadanía colombiana. Por el momento pareciera no haber interés de llevar a cabo estas reformas.
Paralelo a lo anterior, se han generado otras distorsiones democráticas por parte del Consejo CNE, el cual ha otorgado en este mismo periodo de análisis 17 personerías jurídicas nuevas; en su mayoría, con argumentos cada vez más cuestionables, a tal punto de completar, al cierre de este informe, 35 partidos políticos en el país con capacidad de otorgar avales y competir en las elecciones de 2023.
Cronología del Congreso y el Gobierno: de los gozosos a los dolorosos
El Congreso inicio el 20 de julio de 2022 otorgándole la primera victoria a Gustavo Petro mediante la elección de David Racero como presidente de la Cámara y de Roy Barreras como presidente del Senado, ambos integrantes del Pacto Histórico. Con la elección de Barreras, el Gobierno se aseguró de tener un muy buen operador político en el Congreso, el cual manejó con maestría solemne la coalición de gobierno y puso a marchar sus reformas durante los primeros 5 meses.
Los gozosos
Barreras, junto con el ministro del Interior, Alfonso Prada, lograron en el primer tramo de la legislatura: Escoger Contralor General de la República, cercano al entonces presidente del Senado; elegir magistrados en el CNE afines al Gobierno y su coalición. Por otro lado, aprobaron el Acuerdo de Escazú; el Presupuesto General de la Nación (PGN), con las modificaciones realizadas al texto original presentado por el Gobierno Duque; la Reforma Tributaria liderada por el ministro de Hacienda José Antonio Ocampo y la prórroga a la Ley 418 o ley de Paz Total. De igual manera fuera aprobado la creación del Ministerio de la Igualdad. Además de que logró pasar a segunda ronda de debates los proyectos de Acto Legislativo como el Campesino como Sujeto de Derechos, Jurisdicción Agraria, Cannabis de Uso Adulto (proyecto de Juan Carlos Losada) y Reforma Política.
Los dolorosos
Para el primer semestre del 2023 la denominada “luna de miel” del Gobierno Petro en el Congreso comenzó a deteriorarse. En febrero se citaron a sesiones extraordinarias para discutir Plan Nacional de Desarrollo (PND) y la Reforma Salud (fundamental para entender las crisis del Gobierno). Además de que se radicó la Ley de Humanización Penitenciaria, que al parecer nació sin los votos.
El PND fue avanzando en sus discusiones en las Comisiones Tercera y Cuarta tanto de Senado y Cámara, que son las comisiones económicas; pero la Reforma a la Salud no logró avanzar en ese tiempo por el manejo político dado por la entonces ministra de Salud, Carolina Corcho.
En el marco de las discusiones en torno a dicha reforma se dio el primer “revolcón ministerial”, que dejó como saldo el cambio de tres ministros: Educación, Cultura y Deporte. La salida del ministro de Educación, Alejandro Gaviria, se debió a sus profundas diferencias respecto a la reforma liderada en ese entonces por la ministra Corcho. Las otras ministras salientes fueron Patricia Ariza (Cultura) y María Isabel Urrutia (Deporte). Esta última salpicada en un presunto escándalo de corrupción.
El inicio de las sesiones ordinarias se dio mediante el radicado tanto de la Reforma Laboral y Reforma Pensional. Paralelo a esto se estaba hundiendo la Reforma Política, reforma que inició como prioridad para el Gobierno, pero que al final el mismo Roy Barreras, creador de la reforma, la negó y dejó que se hundiera. Esta fue la segunda derrota en el legislativo para la que venía siendo la aplanadora liderada por Barreras y Prada. La primera fue la reforma política liderada por los senadores Ariel Ávila y Humberto de la Calle, la cual pretendía reformar la estructura y elección de los magistrados del CNE, así como de la composición de la Registraduría.
La reforma de la discordia
Para finales de abril de 2023 la Reforma a la Salud, en parte por la que se había citado a sesiones extras, no avanzaba, mientras que las tensiones con partidos de la coalición como la U o el Conservador venían creciendo desde la presentación de esta. Por ello, Petro decidió dar un segundo “revolcón” a su gabinete de ministros, empezando con la salida de la ministra de Salud, Carolina Corcho, pasando por el operador político del Gobierno, el ministro del Interior, Alfonso Prada. También dio salida a dos opositores de la Reforma a la Salud como José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda y Cecilia López, ministra de Agricultura. Además de ellos salieron el ministro de Transporte, el ministro de Ciencia y la ministra de las TIC.
La reconfiguración de la gobernabilidad de Petro
Con base en estos cambios, la relación con el partido Conservador y el Gobierno se deterioró, por lo que esta colectividad liderada por Efraín Cepeda salió de la coalición y se declaró independiente. Aun así, este partido votó positivo el PND, liderado por el director de Planeación Nacional, Jorge Iván Gonzáles y acompañado por los ministros entrantes de Hacienda e Interior, Ricardo Bonilla y Luis Fernando Velasco, respectivamente. El PND fue aprobado y, hasta hoy, es de una de las últimas grandes victorias del Gobierno en el Congreso.
El segundo partido de la coalición de gobierno en saltar a la independencia fue el partido de la U, por las mismas razones del partido Conservador. Paralelo a esto, el mayor operador político que ha tenido el ejecutivo hasta el momento, Roy Barreras, salía del Congreso. Un fallo del Consejo de Estado anuló su elección por doble militancia.
Después de tres meses de desgaste político, dejando ministros y partidos a su paso, la Comisión Séptima aprobó en primer debate la Reforma a la Salud. Con la llegada del nuevo ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, político y médico; junto con el nuevo ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, se logró destrabar el debate.
Otra derrota que sufrió el Gobierno fue la declaración de nulidad en la elección del Contralor General de la República por una demanda de los representantes Jennifer Pedraza, de Dignidad (Independiente) y Cristian Avendaño, del partido Verde (Gobierno). El Consejo de Estado les dio la razón a los representantes y determinó la elección del Contralor tuvo vicios en su trámite desde la Mesa Directiva del Congreso. Por ello, se debe iniciar la elección desde el inicio de la conformación de la lista de aspirantes. El Gobierno ya no cuenta con la coalición que eligió en 2022 a Carlos Hernán Rodríguez y parece que no tendrá nada fácil escoger de nuevo un Contralor cercano.
El impacto del escándalo Benedetti-Sarabia
Tras el escándalo de Armando Benedetti, exembajador en Venezuela y Laura Sarabia, antigua jefa de gabinete se solicitó al Congreso, por medio de la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes, que es la única facultada para investigar al presidente, realizar las pesquisas correspondientes a lo señalado por Benedetti en los audios filtrados por Semana y la revista Cambio. La investigación se da por las denuncias radicadas en dicha comisión por Federico Gutiérrez y por los congresistas Miguel Uribe y Miguel Polo Polo, quienes hacen parte de la oposición al Gobierno Petro.
A raíz de la salida de Roy Barreras del Congreso, esta corporación tuvo que elegir nuevo presidente para los días restantes de esta primera legislatura. Alexander López Maya fue elegido en reemplazo de Barreras, un político más cercano al presidente Petro en su manera de pensar, pero que no posee la misma habilidad política para darle celeridad a los debates de las reformas como lo hizo ya en el pasado Roy Barreras.
Finalmente, las últimas semanas de esta legislatura estuvieron marcadas por victorias y derrotas en el legislativo para el Gobierno. Fueron aprobados en últimos debates los proyectos de acto de legislativo como Jurisdicción Agraria y Campesino como Sujeto de Derechos. Además de que la Reforma Pensional y la Ley de Adición Presupuestal lograron pasar a segundo debate en Senado, lo que las dejó vivas para la otra legislatura. Todo lo contrario pasó con Reforma Laboral que, por una continua falta de quórum, se ha evitado su debate en la Comisión Séptima de Cámara, aunque fue aprobado el informe de ponencia.
En lo que respecta a las perspectivas del Gobierno para la próxima legislatura, todo parece indicar que este continuará con la misma estrategia que viene manejando en los últimos meses: negociar con los congresistas y no con los partidos ni sus jefes. Si los congresistas obedecen a sus jefes políticos, como lo han venido haciendo, Gustavo Petro continuará con su estrategia de la radicalización democrática: la profundización de un gabinete de izquierdas y el llamado a calles para ejercer presión al Congreso para la aprobación de su paquete de reformas sociales, lo que continuará desgastando su coalición de Gobierno, a la par que sacrifica las posibilidades de que sus aliados políticos tengan opciones de quedar elegidos en las elecciones locales del próximo 29 de octubre de 2023.
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