En la plenaria del Senado de la República se aprobó en segundo de cuatro debates el proyecto de ley encaminado a otorgarles el derecho a las familias para que escojan el orden de los apellidos de sus hijos.
Es decir, facultar a que padres y madres puedan poner en el orden que quieran los apellidos. Ya no sería sólo el apellido del padre el que predomine.
La reforma al Estatuto del Registro del Estado Civil de las personas, presentado por el senador Armando Benedetti Villaneda cita textualmente:
En el registro de nacimiento se inscribirán como apellidos del inscrito, el primer apellido del padre y el primer apellido de la madre, en el orden que de común acuerdo determinen el padre y la madre, si fuere hijo matrimonial o extramatrimonial reconocido.
Si al momento de adelantarse el registro del menor de edad hubiere desacuerdo entre los padres, el funcionario encargado sorteará el orden de los apellidos.
El proyecto establece además que el hijo, al alcanzar la mayor edad, podrá solicitar que se altere por una vez el orden de los apellidos.
Sin embargo, ese derecho fungiría para el primogénito y sería para el resto de sus hermanos cuando sean hijos de un matrimonio.