Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.

Petro sacudió su núcleo duro de poder y generó un ruido que ahora busca cómo atajar

El retorno de Armando Benedetti a la intimidad política del presidente Gustavo Petro agitó a su gabinete y a varias figuras del progresismo que aún no terminan de digerir el movimiento. La reorganización del proyecto para buscar un espacio de reelección en 2026 es el objetivo.

Redacción Política

01 de diciembre de 2024 - 10:00 a. m.
El presidente Gustavo Petro reunió el pasado lunes, en la Casa de Nariño, a la directora del Dapre, Laura Sarabia, con el exsenador y exdiplomático Armando Bendetti.
Foto: Archivo Particular
PUBLICIDAD

El núcleo del poder de la administración del presidente Gustavo Petro está ardiendo. Y todo en medio de un cuidadoso movimiento de fichas que está ejecutando el mandatario para enfrentar los 614 días que desde este domingo le restan en la Casa de Nariño y durante los cuales quiere pavimentar el camino para que en el 2026 el progresismo se pueda reelegir en el poder.

Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO

¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar

La movida que desató el seísmo político que atestiguó el país esta semana fue el retorno de Armando Benedetti al lado de Petro, y no solo porque tendrá oficina en el tercer piso de Palacio –donde está también la del mandatario–, sino además por la ola de rechazo en el corazón mismo del gabinete y de la izquierda que generó la entrega de un cargo como asesor grado tres con salario base antes de primas y adendas de más de 10 millones de pesos mensuales.

Más información: Rastrean lazos entre congresistas y posibles irregularidades con la adquisición de tierras

Y aunque el factor salarial no influyó en los cuestionamientos, sí lo hizo que una persona tan cuestionada –tiene siete expedientes judiciales por resolver–, pese a su reconocido manejo de la política estrictamente electoral, regresara del exilio diplomático con lo que parece ser una gran gama de poderes para direccionar el andar del mandatario de cara a la siguiente cita a urnas. Esto es una escena que ya se vio en la campaña de 2022 y por la que el Consejo Nacional Electoral (CNE) tiene una indagación administrativa por posible violación de topes.

Tal fue el ruido que al menos seis ministros, la vicepresidenta Francia Márquez y algunos directores de entidades adscritas al Ejecutivo le exigieron una cita privada al jefe de Estado para pedirle explicaciones. Si bien la principal crítica fue por el reencauche de Benedetti, tampoco dejaron por fuera algunas consultas sobre el poder que tiene Laura Sarabia, directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), y el papel que jugará ahora que su principal rival público estará en la misma orilla de decisión que ella.

Read more!

Consulte aquí: Nuevo Liberalismo movió fichas para el 2026 en medio de diferencias entre los Galán

Hacia afuera todos coincidieron en que las decisiones del presidente “se respetan”, pero de puertas para adentro la molestia se mantiene, es muy fuerte, y el ruido desatado –aunque algunos dicen que calculado por el propio Petro– es lo que viene buscando controlar el mismo mandatario de forma milimétrica. No quiere perder la potencia política que le puede dar Benedetti más allá de la gestión que el Ejecutivo hace con partidos y el propio Congreso, pero tampoco desea que los más fieles a su proyecto terminen alejados.

Ese ajuste de fichas en el ajedrez de poder que rodea a la primera administración de izquierda se da en momentos en que las encuestas de intención de voto no ubican a los posibles aspirantes a suceder a Petro en un buen lugar y que, además, tiene el condimento de un análisis sesudo sobre si la verdadera apuesta debería ser la búsqueda de mayorías en el Congreso.

Es de su interés: El rastro del poder conservador en Mindeportes despertó recelo en el petrismo

“Vamos por el poder”, ha sido la nueva consigna del mandatario que recoge la esencia de estas movidas. Es por eso que, por un lado, se vienen dando reuniones y cruces de mensajes para ver si algunos ministros como Susana Muhamad (Ambiente), Andrés Camacho (Minas), Guillermo Alfonso Jaramillo (Salud) y Daniel Rojas (Educación), entre otros, dejan el gabinete antes de marzo próximo para no inhabilitarse en la contienda.

Read more!
No ad for you

Y, por el otro, busca cómo construir desde sus bases parlamentarias un partido único de izquierdas que –bajo la chapa de Pacto Histórico– reúna a las colectividades que lo llevaron a la Casa de Nariño en 2022. En esto es clave Benedetti, porque –mientras Sarabia continúa al frente de su agenda y desarrollo administrativo de Palacio– el exsenador y exdiplomático despliega toda una operación que asegure votos y apoyos en las regiones; es la puesta en marcha de lo que se denominó poder constituyente al consolidar cuadros petristas en diversas zonas y luego darles espacio electoral en la nueva colectividad que se está gestando.

Otras noticias: Fajardo, López y Vargas lideran intención de voto en Colombia: encuesta Invamer

Pero, en paralelo, Petro busca atajar “el fuego amigo” que hay en su propio círculo íntimo y que también toca a Sarabia, Benedetti y a varios ministros con aspiraciones electorales. El sector más de izquierda de sus adeptos, que incluye a varios exM-19 como Augusto Rodríguez (Unidad Nacional de Protección) y Jorge Lemus (Dirección Nacional de Inteligencia), busca “radicalizar” al mandatario en sus apuestas progresistas sacando a quienes no sean originarios del proyecto; eso hasta lo reconoció públicamente la directora del Dapre.

No ad for you

De hecho, están en una puja frontal por recuperar ese cargo, que estuvo algunos meses en manos de otro exM-19, Carlos Ramón González, ahora salpicado judicialmente por el escándalo de corrupción desatado tras el saqueo a la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres (UNGRD). Incluso, en voz baja, hay fuentes extraoficiales que advierten que hasta buscarían controlar la seguridad del presidente y que de ahí se haya autorizado hace un par de meses –vía decreto– el aumento de personal en la UNP.

Y en la otra orilla hay sectores más moderados, que le explican a Petro que movimientos como el de Benedetti o dejarse tentar por los cantos del ala más radical de su proyecto solo llevaría a entregarle otra vez el poder a la derecha o centroderecha que también viene trabajando en la configuración de planes realistas para buscar fichas que les permitan recuperar el solio de Bolívar y más espacio en el Capitolio.

Incluso, pese a los puentes que venía tendiendo el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo –quien junto al canciller Luis Gilberto Murillo también estaría próximo a salir para evitar una inhabilidad electoral–, la coalición petrista del Congreso está desconcertada ante todas estas movidas sin aparentemente un hilo conductor. Petro dijo que Benedetti lo ayudará en el relacionamiento con el Capitolio, pero se supone que ese es el papel de quien está al frente de la cartera política. De ahí la confusión parlamentaria que aún se siente.

No ad for you

Entérese de esto: Gobierno alista cirugía a solicitudes de asilo: hay más de 30 mil procesos estancados

Dos operadores congresionales de Petro, como lo son la senadora María José Pizarro y el representante David Racero, junto a otras figuras de izquierda entre quienes está el legislador Iván Cepeda, destacaron el espacio deliberativo que abrió el jefe de Estado para explicar la decisión de retornar a Benedetti y cómo operaría en la construcción del proyecto de izquierda para 2026, pero dieron a entender que la decisión aún no se tramita del todo dentro del progresismo.

El jefe de Estado sabe que se vienen días muy movidos y que el 2025 será un año de ajustes para determinar qué tanta fuerza mantiene para que la izquierda siga gobernando, pese a que sus llamados a las calles y la movilización social son cada vez menos escuchados. Ahora, la oposición también viene feneciendo en este espacio.

Conozca estos datos: Benedetti no es el único: Petro tiene su círculo de inamovibles en el Gobierno

Además, con semanas en las que habrá más ajustes en el gabinete y en otros entornos de poder, no se descarta que el presidente siga endureciendo su discurso hacia todo sector que considere no lo apoya o no le es útil en sus propósitos, como lleva al menos 30 días continuos haciéndolo. Y aunque la convocatoria a una constituyente, la viabilidad de la reelección y el supuesto intento de “golpe blando” cada vez hacen menos parte de sus discursos y trinos, la microgerencia del voto a voto ya se desplegó y de ahí que su presencia en regiones sea cada vez mayor.

No ad for you

Solo el pasado viernes estuvo en la cumbre de gobernadores que se desarrolló en Puerto Inírida, capital de Guainía, donde ratificó sus mensajes en torno a la necesidad de mantener en el tiempo su agenda y sacar de la Casa de Nariño sus ejecutorias.

El otro asunto que no es mínimo y sí tiene a varios en Palacio haciendo cuentas es que los alfiles del petrismo no están muy bien ranqueados para suceder a Petro en 2026, de acuerdo con la más reciente medición de Invamer. El sondeo al medir nombres oficialistas lo encabezó el director de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, quien marcó un 8,6%. Luego apareció el exalcalde de Medellín Daniel Quintero, con un 6,1%; después, el canciller Luis Gilberto Murillo con un 4,5%, seguido de la senadora María José Pizarro, que obtuvo el 4,1%.

En ese estudio, realizado entre el 22 y el 26 de noviembre a través de 1.200 encuestas personales en 56 municipios, de los cuales 17 son capitales –y con un margen de error general del 2,83% dentro de una confiabilidad del 95%–, también registraron los ministros del Interior, Juan Fernando Cristo, con un 1,5%, y de Ambiente, Susana Muhamad, con el 1,2%, al igual que el embajador en Reino Unido, Roy Barreras, quien marca un 0,8%. Esto demuestra por qué el mandatario está moviéndose con fuerza.

No ad for you

(“Pacto Histórico se dividirá en dos”: líder de disidencia de Colombia Humana)

La jugada, ante todo esto, es a múltiples bandas y por eso cada movimiento y cada palabra que salgan de la Casa de Nariño y de sus principales alfiles, incluyendo al jefe de Estado, marcarán un derrotero que puede abrirle espacio a un relato que aún no encuentra el Gobierno para mostrar ejecución y pedir la reelección del proyecto, o irse como un boomerang en contra de esos intereses y terminando por voltear el péndulo de las urnas en favor de sus opositores. Las manecillas del reloj se volvieron otro punto de presión en el año, 8 meses y seis días que a partir de este domingo le quedan a Petro en el poder.

👁‍🗨 Conozca cómo votan los senadores y representantes a la Cámara en ‘Congreso a la mano’.

👉 Lea más sobre el Congreso, el gobierno Petro y otras noticias del mundo político.

✉️ Si tiene interés en los temas políticos o información que considere oportuno compartirnos, por favor, escríbanos a cualquiera de estos correos: hvalero@elespectador.com; aosorio@elespectador.com; dortega@elespectador.com; dcristancho@elespectador.com; mbarrios@elespectador.com ; lbotero@elespectador.com o lperalta@elespectador.com.

No ad for you
Conoce más

Temas recomendados:

Ver todas las noticias
Read more!
Read more!
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.