El lugar en el que se ubican los miembros del gabinete cuando el presidente Gustavo Petro cita cada ocho días a los consejos de ministros refleja qué tan cercanos son al jefe de Estado. Y aunque su puesto en la mesa semirredonda en la que se sientan también tiene que ver con la jerarquía que la Constitución le da a las carteras, lo cierto es que entre más cerca del mandatario se esté, más viabilidad de diálogo directo hay.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
Y aunque parece solo un tema de formas y hasta de etiqueta palaciega, de fondo se esconde la conformación del primer círculo de poder del jefe de Estado, lo cual no es menor teniendo en cuenta que en cerca de tres años que lleva el presidente Petro comandando la Casa de Nariño ya ha hecho —como lo explicó este diario— 55 ajustes en su equipo ministerial.
Más información: Contrato por $2,1 billones para elecciones de 2026 tendría un único proponente: ¿Thomas?
La foto más reciente de cómo se mueven los hilos de poder en la Casa de Nariño se vio este lunes, cuando, tras varias sesiones previas, el mandatario decidió que el consejo de ministros de ese día tenía que ser privado; no hubo televisión ni transmisión en redes. Allí, de acuerdo con los registros oficiales, se vio a Petro rodeado de quienes ahora son sus puntas de lanza en el epílogo de su administración, en el cual está enfocado que ni la institucionalidad frene sus intenciones gubernamentales y menos sus aspiraciones electorales con el progresismo.
A su derecha se sentó la directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Angie Rodríguez, quien habitualmente está en esa silla por ser la encargada de engranar el diálogo entre el mandatario y su equipo de trabajo, así como la persona que coordina la agenda su agenda y de paso viabiliza las prioridades.
Consulte aquí: Así se convirtió la firma pública de servicios postales en megacontratista de eventos
Tal y como lo había contado El Espectador, su llegada a Palacio estuvo directamente relacionada con el trabajó que realizó hace algunos meses con el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, una de las personas con mayor influencia en el círculo de poder de Petro. No solo lo conoce desde la época en que el ahora presidente militó en el extinto M-19, al punto que ambos confesaron que alguna vez en la década de los 80 lo ayudó a burlar a las autoridades para entrar clandestinamente al Capitolio, sino que ahora hace parte del sector más petrista del progresismo y por eso tiene la confianza plena del jefe de Estado.
De hecho, en la propia Casa de Nariño se reconoce que Rodríguez y Jaramillo son una llave que permite unir la gestión política con la administrativa, lo que también le ha dado espacio al diálogo de Petro con sectores leales a su proyecto de izquierdas y que se quejaban de que antes no tenían acceso a quien el próximo 7 de agosto completa su tercer año como presidente.
Es de su interés: “No nos comunicamos”: ministro de Igualdad habló de ejecución y de roces con Márquez
La queja recaía especialmente sobre la forma en que la ahora excanciller Laura Sarabia manejó el Dapre, pues desde el mismo Pacto Histórico y de otras filas afines al progresismo hubo una queja generalizada de un presunto “aislamiento” de Petro. Cuando la ya exfuncionaria pasó al Palacio de San Carlos, y llegó Rodríguez a ese cargo, la fluidez del diálogo cambió.
Junto a Rodríguez, en el consejo no televisado de ministros de este 7 de julio —en el que el tema central fue cómo distribuir el presupuesto oficial de 2026 cuando el país entra en forma en año electoral—, estaba sentado el polémico pastor Alfredo Saade, quien completó su segunda semana como jefe de Despacho de la Presidencia.
Entérese de esto: Centro Democrático busca recomponer campaña tras 30 días del atentado a Miguel Uribe
Su aterrizaje al círculo de mando de Petro generó polémica externa y desató ciertos ruidos entre el propio gabinete, pues para algunos ministros resultó por lo menos “extraño” que alguien sin experiencia en el Ejecutivo fuese ahora el encargado de exigirles cuentas y de organizar focos de ejecución que sean claves para la reelección de la izquierda en los comicios del próximo año.
Pero tal es el poder que ha logrado Saade en estos 15 días, pese a sus polémicas propuestas como exigir la reelección de Petro aunque esté expresamente prohibida por la legislación nacional y de paso que quiera promover una constituyente que permita cerrar el Congreso y unificar a las cortes, sin contar sus ataques constantes a la prensa, que ahora es el encargado de atender la crisis en ciernes que puede golpear al país por la elaboración de pasaportes.
En contexto: Estos son los secretos de una frenética semana que dejaron a Petro en guardia
La instrucción de Petro es sacar a la multinacional Thomas Greg & Sons de todo proceso público, como el de pasaportes y la logística de los comicios de 2026 independiente a qué caminos se deban tomar. Esa pelea con la firma privada ya ha cobrado la cabeza de tres cancilleres y le permitió al mandatario atacar a la Registraduría y a la Procuraduría por igual; pero Saade, independiente a qué establezca el ordenamiento jurídico, está ejecutando la orden presidencial a como dé lugar.
Ese poder, en todo caso, ha generado algunas fricciones internas, pues a no todos los miembros del gabinete les ha caído bien, además, las formas no ortodoxas de relacionamiento. Esos roces ya escalaron hasta el piso tres de la Casa de Nariño, donde está el despacho presidencial, y desde allí el mensaje fue explícito: el nuevo funcionario, pese a todo, cuenta con el respaldo directo del jefe de Estado. La excanciller Sarabia es prueba de ello.
Y para completar la foto de quienes ahora están más cerca del mandatario aparece el ministro del Interior, Armando Benedetti, quien en los consejos de ministros ocupa la silla que está justo a la izquierda del presidente Petro. Él venía de ser el jefe de Despacho encargado, pero la llegada de Saade le quitó esa responsabilidad y, por eso, lleva ya dos semanas alejado de los reflectores.
Pero eso no implica que no esté en un trabajo silencioso y milimétrico para intentar construir alianzas legislativas que le den aire a una fracturada relación con el Congreso que puede ser clave, no solo para los intereses reeleccionistas del progresismo sino también para impulsar el relato constituyente con el que el mandatario, graduando de “enemigos del pueblo” a instituciones y personas que no concuerden con sus intereses particulares, está promoviendo librar la batalla electoral.
Ingrese a este enlace: Estas son las fichas con las que Colombia intenta apagar crisis con EE. UU.
Benedetti confirmó hace unas semanas que los comités que se conformaron para la frustrada consulta popular no se deben desactivar, sino que deben tener un componente de movilización permanente y eso pasa, necesariamente, por la directriz política que salga desde su despacho con las instrucciones de Petro. Esa es una de las razones por las que generalmente está al lado del jefe de Estado en los plazoletazos más duros, como el que se realizó hace unos días en Medellín junto a los capos de varias de las narcobandas que delinquen en la capital antioqueña y que intentan cobijarse bajo la llamada “paz total” que promueve la actual administración nacional.
Todo esto también tiene efectos sobre la operativa de la Casa Militar y la misma seguridad del jefe de Estado, pues desde que Rodríguez y Benedetti entraron de lleno al círculo íntimo, y ahora con el refuerzo de Saade, se han dado ajustes para tener gente de mucha más confianza del mandatario a su lado.
Eso sí, como lo reconoció el propio ministro de Defensa, el general (r) Pedro Sánchez, desde su cartera siempre se están analizando los riesgos del mandatario y de paso proveyendo a las personas más capacitadas para garantizar la seguridad del presidente Petro. De hecho, hace solo 24 horas reiteró el refuerzo de esos esquemas ante amenazas que, incluso, han llegado mientras el jefe de Estado sostiene desplazamientos aéreos.
Pero en medio de todo este engranaje se avizoran más cambios en el gabinete, lo que podría volver a generar ajustes en este círculo de poder que rodea a Petro, en especial si se tiene en cuenta que la gestión de estos 13 meses largos que restan de la actual administración estarán fuertemente permeados por la intención de que la izquierda tenga una segunda oportunidad en el poder.
👁🗨 Conozca cómo votan los senadores y representantes a la Cámara en ‘Congreso a la mano’.
👉 Lea más sobre el Congreso, el gobierno Petro y otras noticias del mundo político.
✉️ Si tiene interés en los temas políticos o información que considere oportuno compartirnos, por favor, escríbanos a cualquiera de estos correos: hvalero@elespectador.com; aosorio@elespectador.com; dortega@elespectador.com; dcristancho@elespectador.com; mbarrios@elespectador.com ; lbotero@elespectador.com o lperalta@elespectador.com.