Presidencia de Senado, a voto limpio

Con el mayor hermetismo y peleando voto a voto se definirá hoy, en la sede del Partido de la U, el próximo presidente del Senado entre los candidatos Mauricio Lizcano, Armando Benedetti y José David Name. Decisión que no es de poca monta, pues quien llegue a este cargo tendrá que dirigir la discusión de temas como las reformas a la justicia, política, educación y salud, que son transversales para el cumplimiento de las promesas de gobierno del presidente Juan Manuel Santos.

En medio de reuniones, llamadas y acuerdos se están moviendo los candidatos que buscan ocupar el máximo cargo del Senado. Entre los parlamentarios de la U, unos tienen definido su voto, otros aún no se comprometen y no faltan los que le prenden una vela a cada santo. Así las cosas, dicen que Benedetti cuenta con siete votos, Lizcano con doce y Name con ocho, cuentas que no cuadran porque el partido solo tiene 21 senadores. En esa puja de poderes, cada candidato tiene sus fortalezas y puntos débiles, argumentos que estarían usando sus competidores para sacarlos del camino.

Mauricio Lizcano ha logrado el apoyo de un grupo mayoritario de parlamentarios y entre los senadores de la U genera confianza. Su campaña como presidente del Congreso en representación de las víctimas es bien vista, pero tiene encima el calificativo de uribista, incluso, es ahijado del expresidente. Anoche tuvo un encuentro con varios parlamentarios de la U, donde trató de consolidar el consenso en torno a su aspiración.

Armando Benedetti tiene la experiencia, ya fue presidente del Senado hace cuatro años y durante su período se realizaron las principales reformas del primer gobierno del presidente Santos. Además, su ascendencia en la Costa Atlántica se puede convertir en un respaldo del mandatario, que en gran medida debe su reelección a los votos de esa región. Sin embargo, sus peleas en el interior del partido lo hacen un senador poco querido entre sus colegas, al punto que muchos, aseguran, prefieren no votar que votar por él. Ayer se reunió con Santos pero prefirió no hablar al respecto.

José David Name, al igual que Benedetti, tiene la ventaja de ser de la Costa Atlántica. En la U, diez de los 21 senadores son de esta región y por esta vía, como gesto de agradecimiento, el presidente Santos podría inclinar la balanza a su favor. Name ha logrado apoyos fuera de la región, como el de Roosevelt Rodríguez (cuota de Dilian Francisca Toro) y Germán Hoyos. Si la cuestión es de resultados electorales, Name obtuvo 145 mil votos en las elecciones al Senado, muchos más que Benedetti y Lizcano. Sin embargo, se le critica la falta de liderazgo y de talla política para enfrentar los debates que se vienen y fuerte oposición que significa la llegada del Centro Democrático.

Por ahora, desde la Presidencia no se han metido en esta disputa. Sin embargo, el mandatario Santos sí ha tenido encuentros con Lizcano y con Benedetti, y según confirmaron varios parlamentarios en las últimas horas, se han dado llamadas para averiguar la tendencia, pero sin presionar el voto. La última palabra será dictada hoy en el Claustro La Enseñanza, donde la U elegirá el primer presidente del Congreso del segundo período de Santos.

Con el mayor hermetismo y peleando voto a voto se definirá hoy, en la sede del Partido de la U, el próximo presidente del Senado entre los candidatos Mauricio Lizcano, Armando Benedetti y José David Name. Decisión que no es de poca monta, pues quien llegue a este cargo tendrá que dirigir la discusión de temas como las reformas a la justicia, política, educación y salud, que son transversales para el cumplimiento de las promesas de gobierno del presidente Juan Manuel Santos.

En medio de reuniones, llamadas y acuerdos se están moviendo los candidatos que buscan ocupar el máximo cargo del Senado. Entre los parlamentarios de la U, unos tienen definido su voto, otros aún no se comprometen y no faltan los que le prenden una vela a cada santo. Así las cosas, dicen que Benedetti cuenta con siete votos, Lizcano con doce y Name con ocho, cuentas que no cuadran porque el partido solo tiene 21 senadores. En esa puja de poderes, cada candidato tiene sus fortalezas y puntos débiles, argumentos que estarían usando sus competidores para sacarlos del camino.

Mauricio Lizcano ha logrado el apoyo de un grupo mayoritario de parlamentarios y entre los senadores de la U genera confianza. Su campaña como presidente del Congreso en representación de las víctimas es bien vista, pero tiene encima el calificativo de uribista, incluso, es ahijado del expresidente. Anoche tuvo un encuentro con varios parlamentarios de la U, donde trató de consolidar el consenso en torno a su aspiración.

Armando Benedetti tiene la experiencia, ya fue presidente del Senado hace cuatro años y durante su período se realizaron las principales reformas del primer gobierno del presidente Santos. Además, su ascendencia en la Costa Atlántica se puede convertir en un respaldo del mandatario, que en gran medida debe su reelección a los votos de esa región. Sin embargo, sus peleas en el interior del partido lo hacen un senador poco querido entre sus colegas, al punto que muchos, aseguran, prefieren no votar que votar por él. Ayer se reunió con Santos pero prefirió no hablar al respecto.

José David Name, al igual que Benedetti, tiene la ventaja de ser de la Costa Atlántica. En la U, diez de los 21 senadores son de esta región y por esta vía, como gesto de agradecimiento, el presidente Santos podría inclinar la balanza a su favor. Name ha logrado apoyos fuera de la región, como el de Roosevelt Rodríguez (cuota de Dilian Francisca Toro) y Germán Hoyos. Si la cuestión es de resultados electorales, Name obtuvo 145 mil votos en las elecciones al Senado, muchos más que Benedetti y Lizcano. Sin embargo, se le critica la falta de liderazgo y de talla política para enfrentar los debates que se vienen y fuerte oposición que significa la llegada del Centro Democrático.

Por ahora, desde la Presidencia no se han metido en esta disputa. Sin embargo, el mandatario Santos sí ha tenido encuentros con Lizcano y con Benedetti, y según confirmaron varios parlamentarios en las últimas horas, se han dado llamadas para averiguar la tendencia, pero sin presionar el voto. La última palabra será dictada hoy en el Claustro La Enseñanza, donde la U elegirá el primer presidente del Congreso del segundo período de Santos.