Las divergencias políticas frente a la reforma a la salud

La reforma a la salud es un tema que aún no logra resolver el gobierno de Gustavo Petro. Sus mayores aliados políticos en el Congreso, los partidos tradicionales, le han puesto un palo en la rueda al proyecto que no logra convencerlos, pero que aun así buscan concertar con el Ejecutivo en un tire y afloje constante. Los partidos Liberal, Conservador y de la U presentaron en el Capitolio un documento que, aunque no es un nuevo proyecto de reforma, sí busca modificar más de la mitad del articulado entregado por la ministra de Salud, Carolina Corcho.

La reforma a la salud es un tema que aún no logra resolver el gobierno de Gustavo Petro. Sus mayores aliados políticos en el Congreso, los partidos tradicionales, le han puesto un palo en la rueda al proyecto que no logra convencerlos, pero que aun así buscan concertar con el Ejecutivo en un tire y afloje constante. Los partidos Liberal, Conservador y de la U presentaron en el Capitolio un documento que, aunque no es un nuevo proyecto de reforma, sí busca modificar más de la mitad del articulado entregado por la ministra de Salud, Carolina Corcho.

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La supervivencia del documento original del Gobierno parece imposible. Aunado a los 110 artículos que presentaron los tres grandes partidos, dos de los cuatro coordinadores ponentes del proyecto gubernamental, es decir, quienes tendrán que liderar el debate y defender el articulado del Gobierno, pertenecen a los partidos Liberal y Conservador. Aunque aseguran que hay varios puntos en los que sus colectividades coinciden con el Gobierno, no ocultan que los intereses que para ellos priman son los de sus partidos.

El representante a la Cámara por el Partido Conservador Gerardo Yepes fue el encargado de dejar en manos de David Racero, presidente de la Cámara baja, el texto con el que los tres partidos propone modificaciones al proyecto del Gobierno. Yepes le manifestó a este diario que, aunque mantienen diferencias con lo que propone el Ejecutivo, concuerda en lo más esencial: es necesario modificar el sistema de salud de Colombia. Sin embargo, sostiene que se mantendrán firmes en las 20 líneas que proponen, dentro de las que destacan tener un sistema mixto (público y privado), la no burocratización de la salud y mantener las entidades prestadoras de salud (EPS).

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Por su parte, el congresista del Partido Liberal Germán Rozo, quien también es coordinador ponente del proyecto, asegura que “lo que se ha conversado en el interior del partido es que en el debate se deben defender estas posturas que esperamos concertar con el Gobierno”. Manifiesta que la prioridad la tendrá el documento que presentaron para modificar el proyecto del Gobierno, pero que “eso no quiere decir que vamos a votar todo en contra del proyecto del Gobierno, sino que esperaremos la discusión en esas líneas en las que creemos que se deben cambiar para el bien del país”.

También así, el representante Yepes agrega que por ahora resta esperar la respuesta del presidente Petro a quien David Racero tendría que hacerle llegar el documento prontamente. Los dos congresistas dicen que dentro de lo que se ha hablado en sus respectivas colectividades, lo que más preocupa de lo que presentó la ministra Corcho es el impacto fiscal del proyecto y que no es claro cómo se materializará, por eso dentro de su propuesta incluyen puntos relacionados con este tema, para que no haya una afectación tan grande en la economía del país.

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“Lo que más nos preocupa es la financiación de todo esto, hay que tener mucho cuidado cómo desde lo financiero se puede realizar el proyecto. Otro inamovible es que no se estatice la salud, creemos que se debe garantizar un sistema mixto en el que las personas en Colombia puedan escoger, lo que implica respetar y proteger la empresa privada como las EPS o las farmacéuticas”, sostiene el representante liberal. A esto Yepes agrega que en el documento presentado por los partidos “procuramos establecer que haya una atención primaria, pero que también haya una tranquilidad para que el país no vaya a volcarse a lo que había antes de la Ley 100, de una precariedad en la salud”.

Ajena a los asuntos internos de los partidos tradicionales, la también coordinadora ponente Marta Alfonso, de la Alianza Verde, afirma que “con el representante Rozo hemos coincidido en muchos de los aportes que hemos hecho para el mejoramiento del articulado del Gobierno. Con el Partido Conservador ha sido un poco más complicado, porque ellos tienen una postura más reservada frente a la reforma. Lo más seguro es que cuando terminemos de revisar todo el articulado ellos empiecen a proponer cambios”.

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