Soplan vientos de tormenta al interior de Cambio Radical, el partido del vicepresidente Germán Vargas Lleras. “Al alcalde de Riohacha le dieron el aval los mismos que me atacaron y le dieron el aval a Oneida Pinto. Que pongan la cara, que respondan”, escribió en su cuenta de Twitter el senador Carlos Fernando Galán, quien fue director de la colectividad hasta el 21 de mayo de 2015, cuando presentó públicamente su renuncia debido, precisamente, a la polémica desatada por el otorgamiento de avales a personas cuestionadas, entre ellas a la entonces candidata a la Gobernación de la Guajira, Oneida Pinto, para las elecciones de locales y regionales de octubre de ese año.
A Pinto se le señalaba de tener el padrinazgo de dirigentes políticos como el mismo exgobernador “Kiko” Gómez (otro avalado por Cambio Radical), recientemente condenado a 55 años de prisión por asesinato, y en junio del año pasado el Consejo de Estado anuló su elección al considerar que estaba inhabilitada pues no renunció a tiempo a la Alcaldía de Albania.
Pero además, la Fiscalía acaba de anunciar que le imputará cargos por la presunta suscripción irregular de un contrato que tenía como finalidad la reducción de la mortalidad infantil en dicho municipio. Deberá responder por los delitos de peculado, celebración de contratos sin cumplimiento de los requisitos legales y falsedad en documento público y privado.
Y para rematar, la exmandataria está investigada por su presunta participación en una serie de amenazas contra el exgobernador encargado del departamento, Jorge Enrique Vélez, quien fue designado como su reemplazo por el presidente Santos, tras la decisión del Consejo de Estado.
Sobre el caso del alcalde de Riohacha, Fabio David Velásquez, avalado también por Cambio Radical y capturado este viernes, se trata de una investigación que se adelanta por las irregularidades en la celebración de contratos de alimentación escolar en el departamento. Los hechos materia de investigación tienen que ver con el contrato firmado con la Asociación Social del Caribe (Asocar) por un valor cercano a los 5.700 millones de pesos, que fue entregado de manera directa y sin licitación pública.
El día de su renuncia, Carlos Fernando Galán aseguró que cuando asumió la dirección de Cambio Radical, en septiembre de 2013, el compromiso fue fortalecer y depurar el partido y para las elecciones de autoridades territoriales de 2015, se definió un mecanismo colectivo de definición de avales en el que, si había aspirantes cuestionados, se debatía el tema con la bancada y el comité central.
“Con este procedimiento me parecía que podríamos blindar al partido y evaluar si había fundamento o no en un cuestionamiento. Infortunadamente, el secretario general del partido (Antonio Álvarez Lleras) expidió avales a solicitud de algunos delegados regionales sin que se surtiera ese procedimiento. Yo plantee la necesidad de dar marcha atrás a esto para revisarlo a profundidad y el secretario tomó la decisión contraria, entonces decidí marginarme de la dirección”, explicó Galán.
Y el tiempo parece darle la razón. Ahora el senador sale a cobrar los cuestionamientos que le hicieron internamente en la colectividad al tomar esa postura, que iba en contra de los intereses electorales. Y aunque no da nombres propios, es claro que sus dardos apuntan a la llamada Casa Char, que lideran el hoy alcalde de Barranquilla Alejandro Char y el senador Arturo Char, quienes respaldaron con firmeza la candidatura de Oneida Pinto: “El aval para ella está confirmado, porque es una persona que no tiene ningún señalamiento jurídico (...), ella no tiene ningún problema”, dijo este último en una declaración a los medios ratificando ese respaldo.
Y también hay que decir que el agua sucia le cae al actual representante a la Cámara Rodrigo Lara, quien reemplazo a Galán en la dirección de Cambio Radical, quien hasta acompañó a Pinto en campaña y la defendió a capa y espada: “No es cierto eso que están diciendo de esta mujer maltratada por una espiral de críticas, porque es fácil estigmatizar a los políticos de las regiones, es fácil estigmatizar a las mujeres”, manifestó.
Incluso, por esa época se conoció de un video de Lara junto a Pinto en tarima diciendo: “Los invito a votar por Oneida, votar por una mujer, votar por el cambio, que significa la unidad Guajira, que toda La Guajira de manera fervorosa, apasionada, sincera y cariñosa la está apoyando”.
Sobre Antonio Álvarez Lleras, tío abuelo de Germán Vargas Lleras y a quien Galán sí nombró directamente el día de su renuncia, las explicaciones que dio en su momento sobre la entrega de avales fue que siguió los lineamientos de los dirigentes de Cambio Radical en las regiones: “Yo me atuve a lo que las bases del partido me pidieron, por mayoría, en esos departamentos”, dijo.
Ahora la tormenta arrecia con la detención del alcalde Velásquez. Y ya se escuchan voces reclamando responsabilidad política, más aún cuando Cambio Radical fue también el partido que avaló al destituido gobernador del Amazonas, Manuel Carebilla, investigado por presuntamente solicitarle dinero a sus subalternos cuando ofició como representante a la Cámara. En abril del año pasado, el exmandatario se entregó a las autoridades después que la de Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia emitiera una orden de captura en su contra por los delitos de cohecho, peculado y falsedad en documento público.
Para Alejandra Barrios, directora de la Misión de Observación Electoral (MOE), toda la responsabilidad debe caer sobre los partidos que avalan a sus candidatos de manera irresponsable pese a las advertencias. “No tiene ningún sentido y da un pésimo mensaje en materia de ética política y administración pública que sean los mismos directivos que tomaron tan malas decisiones los responsables de presentar las ternas de los Gobernadores encargados en tanto se llama a elecciones atípicas”, enfatizó.