Un balance poco alentador en la reparación de víctimas

Si algo ha querido dejar claro el Gobierno en medio de los diálogos de paz que adelanta con las Farc en La Habana, y los que pronto iniciará formalmente con el Eln, es que en esta ocasión las víctimas desempeñan un papel fundamental como centro y eje de las negociaciones. El reconocimiento de su condición y las medidas adoptadas para su reparación serán fundamentales para el sostenimiento de la paz en caso de que se logre un acuerdo final con las guerrillas. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos hechos hasta el momento, existe preocupación por la falta de garantías en muchas regiones en las que el conflicto se mantiene y la constante revictimización de reclamantes de tierras y líderes de derechos humanos.

Hoy, al conmemorarse el Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas en Colombia, el balance es agridulce, y así lo dejan ver tres víctimas de la guerrilla, el paramilitarismo y el Estado, que han vivido los rigores del conflicto.Sigifredo López, Presidente de la Federación de Víctimas de las Farc

Es muy importante que Colombia haya reconocido y ordenado reparar, así sea administrativamente, a las víctimas sin haber terminado el conflicto. Eso es un esfuerzo muy grande que hay que reconocerle al presidente Juan Manuel Santos. infortunadamente el Estado no tiene los recursos suficientes para reparar a todas las víctimas. Han pasado ya cuatro años y tan sólo se han reparado a 600 mil personas y son 7 millones de víctimas. ¿Cuántos años más vamos a necesitar? A eso se suma que en La Habana se nos dijo que las víctimas íbamos a ser el centro de los acuerdos, pero no hemos visto el compromiso de las Farc para reparar a nadie, para decir la verdad, para entregar cadáveres, para devolver secuestrados o entregar menores. Ellos tienen que asumir la responsabilidad de reparar a sus víctimas y disponer recursos para ello, y no lo han hecho, es más, dicen que no tienen plata. A las víctimas y a los ciudadanos excluidos no les ha llegado la hora y siguen esperando oportunidades de inclusión social.

Soraya Bayuelo, Líder de víctimas de los Montes de María

Ha habido muchos avances en el país y la Ley de Víctimas, por ejemplo, ha sido una herramienta clave para visibilizarnos. Sin embargo, todavía hay vacíos y cosas en las que trabajar. Está el tema de las garantías de no repetición: Acá, en los Montes de María, los violentos están enviando amenazas e intentado desestabilizar a las comunidades para tratar de meterles miedo de nuevo. No podemos permitir eso. A veces lo que le hace falta a la Ley es el “cómo” deben hacerse las cosas. Mejor dicho, cómo se deben articular e implementar en los territorios para que la reparación sea digna, integral y transformadora. Hay que seguir trabajando en eso, hay que abrir espacios de diálogo con las comunidades, con las organizaciones y con las víctimas de todos los actores armados del conflicto para que no haya sólo una representatividad, sino también una participación efectiva. Eso de alguna manera se ha logrado en un porcentaje, pero falta implementarlo más.

José Antequera Guzmán, Víctima del Estado

El tema de las víctimas en este momento se está reconfigurando de alguna manera y los acuerdos que se han producido en La Habana están anunciando modificaciones en lo que ha venido siendo el proceso de reparación y reconocimiento. Nosotros creemos esos cambios son positivos, porque en gran medida lo que está discutiéndose es la posibilidad de que la verdad vuelva a estar en el centro de la reparación con una comisión de la verdad, y que el proceso y las medidas de no repetición estén ligadas a lo que será la jurisdicción especial para la paz. Hay avances, sin embargo, son demasiado lentos considerando el universo de víctimas. Además, dichos avances todavía no logran saldar el problema de reconocimiento suficiente de casos como el genocidio contra la Unión Patriótica y otros crímenes de Estado. El tema hoy tiene el foco puesto en el hecho de que el protagonismo sea de los movimientos y las organizaciones en los territorios de víctimas que están reclamando que el proceso de paz se consolide y las medidas que se han acordado se empiecen a implementar.