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Violencia en casa: realidad oculta

Según un estudio de Medicina Legal, 2.115 mujeres corren peligro de ser asesinadas por sus parejas o exparejas en ciudades como Popayán, Bogotá y Cartagena.

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Redacción Política
13 de agosto de 2015 - 03:35 a. m.
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En 2014, dicha entidad realizó 75.939 peritajes por violencia intrafamiliar, que incluye violencia contra niños y adolescentes, violencia contra adultos mayores y violencia de pareja, frente a la cual las mujeres y niñas llevan la peor parte, con 85% de los casos.

Estas son algunas de las preocupantes cifras dadas a conocer durante un debate realizado ayer en la Comisión Primera de la Cámara —citado por las representantes Ángela Robledo y Angélica Lozano, de la Alianza Verde—, en el cual se concluyó que la violencia en la casa está cobrando más víctimas que la guerra. “Comparando estadísticas de soldados muertos en combate frente a mujeres asesinadas en sus casas, nos da una cifra escalofriante: mientras en un mes mueren 21 soldados, 63 mujeres son asesinadas por violencia de género. Sólo entre enero y febrero de este año, 126 mujeres fueron asesinadas”, manifestó Robledo.

De acuerdo con Medicina Legal, los esposos, exesposos, compañeros, excompañeros permanentes o novios son los principales agresores. En otras palabras, la frase “te voy a matar” se ha convertido en una expresión cotidiana que aniquila a las mujeres, las paraliza y las inunda de miedo para denunciar y movilizarse.

La entidad reveló también que muchas de las mujeres que fueron valoradas en exámenes médicos legales “regresaron luego muertas”, por lo que decidieron aplicar un cuestionario que permite valorar el riesgo de la violencia mortal contra las mujeres, el cual arrojó las cifras mencionadas.

Tanto Robledo como Lozano le pidieron al Gobierno —que se hizo presente en el debate con el ministro de Justicia, Yesid Reyes, y la directora de Bienestar Familiar, Cristina Plazas, entre otros funcionarios— implementar acciones contundentes para salvar esas vidas, pues está demostrado que las medidas de protección no se cumplen, que hay ausencia de rutas claras de atención, que falta coordinación y gestión interinstitucional y, sobre todo, que no hay seguimiento de los casos críticos.

Por Redacción Política

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